El Consejo de Gobierno extremeño ha aprobado, en su última sesión, un decreto por el que se establecen las bases reguladoras de las ayudas para el fomento y apoyo de la actividad comercial en la comunidad autónoma, con una dotación económica de 1.144.075 euros.

La apuesta decidida del Ejecutivo extremeño por la innovación, la modernización y la especialización del sector comercial constituyen la finalidad primordial de las ayudas contenidas en el decreto.

La nueva norma introduce una serie de cambios para dotar de mayor transparencia y rigor en los criterios de evaluación de solicitudes de ayuda y otorgar una mayor eficiencia en la asignación de recursos. Además, contempla una serie de medidas y líneas de ayudas que afectan de manera integrada a autónomos y la pequeña empresa comercial, asociaciones de comerciantes, organizaciones interempresariales y ayuntamientos en el ámbito de sus competencias.

La convocatoria de la mayoría de las líneas de ayudas se hace en régimen de concurrencia competitiva mediante convocatoria periódica, si bien existen modalidades de ayudas en las que por su especificidad, la exigencia de requisitos muy concretos y la limitada concurrencia, se considera más conveniente configurar estas líneas como subvenciones en régimen de concesión directa mediante convocatoria abierta.

Las ayudas alcanzan tanto al comercio tradicional independiente como al comercio asociado en general, otorgando un trato preferencial a las pymes comerciales que se adhieren a los grupos de distribución y franquicias regionales.

Se engloban medidas para apoyar las actuaciones de modernización del pequeño y mediano comercio, mediante la incorporación de elementos físicos y/o funcionales que mejoren su potencial de mercado y faciliten una gestión más competitiva.

Con el objetivo de fomentar la actividad comercial en el ámbito rural, se incluye una línea de ayudas dirigida a corporaciones locales para que se doten de una infraestructura básica que facilite la comercialización de productos autóctonos y otra línea destinada a nuevos empresarios, para la implantación de comercios con una oferta básica de productos y servicios.

Otras ayudas contenidas en el decreto buscan potenciar la actividad comercial en los cascos históricos de las ciudades poniendo en valor los mercados de abastos y dotando a los centros comerciales abiertos ya creados, de una gerencia personalizada.

También contempla ayudas para la cooperación empresarial, el apoyo e impulso a las franquicias extremeñas y para la incorporación de la pyme comercial al comercio electrónico. Asimismo, la nueva norma hace referencia al desarrollo de la formación comercial como herramienta para fomentar la calidad y la eficiencia de los empresarios y trabajadores del sector comercial.