La situación del Festival de Teatro Clásico de Mérida es crítica. Así lo ha reconocido esta mañana la consejera de Educación y Cultura, Trinidad Nogales, cuando ha comparecido ante los medios de comunicación en la visita institucional que ha realizado al Ayuntamiento de Mérida.
En cualquier caso, la consejera ha garantizado que el próximo año los ciudadanos tendrán "un festival sostenible, de calidad y que sea el referente internacional que todos deseamos", ya que de forma paralela está trabajando en un plan de viabilidad para futuras ediciones que se abordará en el seno del Consejo Rector del Consorcio.
Trinidad Nogales ha asegurado que a día de hoy "ha sido imposible cuantificar la deuda que arrastra el Festival". La situación actual es muy compleja, afirma la consejera, y "seguimos sin disponer de la pertinente documentación contable". De hecho, la Agencia Tributaria está realizando una inspección, "las cuentas del Festival están embargadas, hay impagos de larga duración a la seguridad social y se debe dinero a las compañías y a los trabajadores del Festival".
"Tenemos constancia de algunos impagos de la gerencia a los trabajadores, empresas y demás acreedores que han comunicado su indignación a esta Consejería de Educación y Cultura. Entendemos perfectamente la situación tan crítica que están atravesando, pero debemos respetar los cauces legales a fin de desbloquear esta situación".
La Comisión Ejecutiva del Consorcio del Festival se reunió el pasado 5 de octubre y decidió, por unanimidad, solicitar de la Intervención de Hacienda de la Consejería de Economía la intervención de la contabilidad. La gerencia ha obstaculizado este control financiero, por lo que ahora la Intervención deberá adoptar las medidas legales que considere oportunas.
Mientras tanto, "ante la permanente obstrucción con la que nos hemos encontrado", la Consejería de Educación y Cultura ha abierto un expediente disciplinario contra el gerente del Festival, que conducirá a su despido por inhibición de su responsabilidad, ha dicho la consejera.
La consejera también ha querido aclarar que el Festival "tiene garantizada su continuidad y que vamos a depurar responsabilidades. Este nuevo Gobierno se ha encontrado un Festival en estado crítico y ahora, en un ejercicio de responsabilidad, lo debemos salvar. Vamos a lograr un Festival sostenible, de calidad y un festival que respete a los ciudadanos en el buen uso del erario público", ha señalado la consejera.
