El presidente del colectivo de discapacitados de Valencia de Alcántara (AIDIM), Francisco Sánchez-Oton, ha manifestado la necesidad de apoyo económico de las administraciones públicas para mantener el centro de día y poder acometer el proyecto de construcción de una residencia para acoger a los usuarios de este centro.
Sánchez-Oton tuvo la oportunidad de explicar personalmente las necesidades del colectivo al presidente de la Mancomunidad Integral Sierra de San Pedro, Rodrigo Nacarino y al alcalde de Valencia de Alcántara, Pablo Carrilho. Ambos tuvieron la oportunidad de visitar el centro que da servicio a usuarios discapacitados de distintas edades que precisan de personal profesional que pueda atender sus necesidades.
LLamamiento ciudadano
A pesar de las aportaciones económicas de los socios del colectivo y de las ayudas de las instituciones, el presidente de Aidim ha hecho un llamamiento a los ciudadanos de Valencia de Alcántara para que colaboren con una aportación de 10 euros al año para mantener unas instalaciones que se abrieron recientemente y que suponen un coste que oscila entre los 4.000 y 5.000 euros, "y no es suficiente con los 4.000 euros que aporta el consistorio de Valencia y que nosotros valoramos muy positivamente", dijo. Los alumnos, con edades que oscilan entre los 6 y los 15 años, gozan de la atención de una veintena de voluntarios que les ayudan. Además, los servicios sociales del consistorio y desde la Junta de Extremadura también se aporta personal cualificado para impartir talleres de apoyo escolar, ayuda especializada, cursos de formación vial o primeros auxilios, entre otras materias.
Festival solidario
Además, AIDIM ha celebrado recientemente un festival solidario de corales con la participación de la Coral de San Vicente de Alcántara, el grupo Adaggio y el colectivo Juéllega Extremeña, que recaudaron cerca de 500 euros para cubrir las necesidades más perentorias de la asociación de discapacitados de Valencia de Alcántara.
Residencia en Valencia
La asociación mantiene el objetivo de crear una residencia para usuarios en las mismas instalaciones. Se trata de un proyecto que ya está diseñado, que se ubicaría en la planta superior del centro de día y que tiene un coste de unos 200.000 euros. "Sólo está pendiente de conseguir financiación para poder ejecutarlo", recordó Sánchez-Ótón, quien aseguró que los usuarios necesitan esta residencia para estar en su ambiente y no tener que desplazarse a centro de poblaciones como Badajoz, Mérida o Cáceres.
