Diversos colectivos políticos, empresariales y sociales de Sierra de Gata se han unido para elaborar una candidatura independiente e intentar hacerse con la presidencia de Adisgata después de que el PSOE haya apostado por la continuidad designando como aspirante al alcalde de Descargamaría.
El proceso para la renovación de los órganos de gobierno del grupo de acción local se ha abierto tras las últimas elecciones municipales y ha llevado a los socialistas a designar un nuevo candidato después de que la dirección del PSOE impidiera a José Luis Solís, actual presidente, prorrogar su mandato durante cuatro años más.
Los resultados obtenidos por el PSOE en la comarca de Sierra de Gata, que se ha convertido en el último reducto socialista de Extremadura, ofrecían buenas perspectivas para consolidar su hegemonía en Adisgata. Sin embargo, en el proceso tienen derecho a voto, no sólo las corporaciones locales, sino otros colectivos empresariales y sociales y también entes supracomarcales.
Pero el PSOE provincial no ha podido controlar los movimientos internos de un sector del partido en la comarca que ha logrado imponer una línea continuista al situar como presidente al alcalde de Descargamaría, Ángel García Luís, que cuenta con el respaldo del actual, José Luis Solís.
Los socialistas abrieron un proceso interno para elegir candidato a la presidencia del grupo de acción local y hubo dos alcaldes que le disputaron el puesto a García Luís: el de Hoyos, Marcelo Hernández, y el de Torre de Don Miguel, Ernesto Iglesias. Cuando la mayoría daba por sentado que el edil de Hoyos sería elegido candidato, saltó la sorpresa y en la última de las votaciones celebrada se alzó con el triunfo el alcalde de Descargamaría.
El resultado de la votación ha llevado a movilizarse a distintos colectivos que buscan un aire de renovación y renegeración para Adisgata. Conscientes del desencanto de los socialistas por el resultado de la votación y aprovechando las divisiones internas del PSOE en la Sierra de Gata, los promotores de la nueva candidatura tratarán de integrar en sus filas, incluso, a reconocidos desencantados de marcado carácter progresista que rechazan la línea continuista marcada por José Luís Solís.
En el caso de lograr su objetivo, la candidatura alternativa solicitará a la asamblea general que el voto para la elección de presidente sea secreto, algo que deberá decidir el máximo órgano de la asociación teniendo en cuenta que no está contemplado en los estatutos. De este modo, los independientes tendrían garantizado el apoyo de numerosos socialistas que rechazan al alcalde de Descargamaría y que no le apoyarían en una votación secreta.
Aunque el PSOE tiene mayoría en los ayuntamientos con derecho a voto, la irrupción de la nueva candidatura dificultará el nombramiento de García Luís como presidente, ya que no basta con mayoría para triunfar, sino que necesita el respaldo de dos tercios de los votos de la asamblea general. En caso de producirse una votación ajustada, sería necesario proclamar una candidatura de consenso integrada por aspirantes de ambas listas.
