José Antonio Monago, líder de los populares extremeños, ha comunicado al presidente del PP, Mariano Rajoy la renuncia a suprimir el impuesto de sucesiones, una de las medidas prometidas en campaña electoral y que sí se aplicará en otras regiones españolas.

 La decisión adoptada por Monago responde a una de las condiciones acordadas entre el PP e IU en Extremadura, para "modular" la aplicación de dicho impuesto, en función del tamaño de la herencia y del nivel de renta.

Rajoy tampoco se ha negado a modular el impuesto sobre el patrimonio en Extrremadura, aunque no constituye una competencia autonómica.

"TIJERETAZOS"

En el encuentro mantenido por ambos dirigentes políticos en la capital de España,  Monago ha dado a conocer a Rajoy la composición de su Gobierno, que integrará a independientes y reducirá de once a siete las consejerías, como abanderó en todos los actos de campaña electorales previos al 22-M.

El "tijeretazo" a los gastos será también una de las señas de identidad del nuevo Gobierno. Monago tiene el objetivo de reducir el número de asesores de los más de 40 actuales a no más de siete u ocho, entre los cuales también integrará a independientes con buen expediente académico. Además, confirmó que auditará las empresas públicas antes de acordar su destino.

Además, será el Parlamento extremeño el que decida que hacer con la oficina del expresidente de la Junta de Extremadura, un despacho que dirigido por Ibarra generó 1.600.000 euros desde su creación en el año 2007.