Un deslizamiento de tierras  que se ha originado en las obras de construcción de la autovía EX-A1 retrasará la entrada en funcionamiento del tramo comprendido entre Coria y Moraleja, según ha confirmado Radio Interior.

La Junta de Extremadura ha reconocido que ha surgido "un problema geotécnico" y que la incidencia no es nueva, pues ya se registró un hecho similar el pasado año. La Dirección General de Infraestructuras y Agua ha confirmado que se ha encargado un nuevo estudio del terreno y que se trata de "un problema aislado y señalizado".

Otras fuentes consultadas por Radio Interior han informado que los técnicos barajan varias opciones para dar una solución al problema. La primera de ellas pasa porque la Junta de Extremadura apruebe un modificado de la obra con el consiguiente retraso en la apertura al tráfico rodado del tramo Coria-Moraleja.

La segunda opción consiste en recepcionar la obra dejando sin ejecutar la parte afectada por el deslizamiento, lo que obligaría a abrir el tramo sólo parcialmente. En el caso de adoptarse esta solución provisional, los vehículos se verían obligados a abandonar la autovía al llegar a las primera salida, situada en las proximidades de la ITV y la cooperativa Copal, bordear Coria por la antigua EX-108 y volver a incorporarse a la altura del cruce de Calzadilla.

Cualquiera de las dos opciones tendrá un elevado coste que los técnicos calculan entre 15 y 20 millones de euros, lo que agrava aún más la situación debido a las dificultades económicas por las que atraviesa la Administración autonómica. La complicación es aún mayor porque no hay consejero de Fomento, que cesó el pasado 10 de junio y ha dejado una vacante sin cubrir con un gobierno en funciones.

El problema se ha originado por las características del terreno, formado por suelos arcillosos, lo que probablemente obligará a aprobar un modificado del trazado que implica la expropiación de los terrenos colindantes para poder proporcionar al talud una pendiente menor y poder estabilizar el terreno mediante pilotes y muros pantalla.

Ante las preguntas de Radio Interior sobre esta posibilidad, la Junta de Extremadura sostiene que, por el momento, la obra sigue su curso y que se está estudiando cómo abordar la situación para solucionarlo. Pese a las dificultades existentes, el Gobierno regional no prevé retrasos en la entrega de las obras que, según afirma, siguen su ritmo.

La Junta de Extremadura adjudicó en agosto de 2008 el tramo Coria-Moraleja este de la autovía EXA1 a la unión temporal de empresas formada por Grupo Empresarial Magenta, S.A., y Corsán Corviam Construcción, S.A., por un importe de 38.050.740 euros y un plazo de ejecución de 35 meses. El tramo tiene 10,28 kilómetros de longitud y constará de un paso superior, nueve pasos inferiores y un viaducto.