La 206 edición de la Fiesta del Árbol de Villanueva de la Sierra ha tenido un marcado carácter reivindicativo para conseguir la distinción de Fiesta de Interés Turístico Regional para la celebración ecológica más antigua del mundo. Este ha sido el principal mensaje que han lanzado las autoridades municipales con su alcalde, Francisco Javier Simón, a la cabeza. El dirigente local ha demandado una implicación directa y contundente de las autoridades con la fiesta medioambiental de Villanueva. Así lo expresó durante su discurso institucional y también en los micrófonos de Radio Interior. Para Simón no se puede demorar más en el tiempo este distintivo que sería un revulsivo para el turismo de Villanueva, de Sierra de Gata y de todas las comarcas colindantes como el Valle del Alagón o Tierras de Granadilla.

El acto institucional contó con el respaldo y apoyo del director general del Medio Natural, Guillermo Crespo, el presidente de la Diputación de Cáceres, Juan Andrés Tovar, la diputada de Cultura, Silvia González, así como las autoridades comarcales encabezadas por el presidente de la Mancomunidad de Sierra de Gata, Alfonso Beltrán y los alcaldes de la zona. Crespo puso en valor la importancia natural de Extremadura, y ofreció datos contundentes como que la provincia de Cáceres es la primera provincia española en cuanto a superficie forestal o que uno de cada tres litros de agua dulce embalsada está en Extremadura. Es por ello que mostró todo su apoyo a Villanueva y a la Fiesta del Árbol y reconoció que durante las seis ediciones que ha participado en la celebración ha ayudado a plantar entre 15 y 20 árboles. Sobre la petición de declaración de Interés Turístico Regional, se mostró convencido en que si se sigue trabajando como hasta ahora se podrá conseguir, e incluso una celebración que no albergase sólo un día del calendario, sino varias jornadas medioambientales.

El presidente de la Diputación de Cáceres, Juan Andrés Tovar, también mostró su apoyo a la demanda de Villanueva de la Sierra y dijo que siempre ha intentando participar en esta celebración cada Martes de Carnaval para apoyarla. Destacó que es una fiesta entrañable que los vecinos de la localidad viven con mucha emoción y que además presumen de llevar siempre la ecología de la mano.

Arba Extremadura, que lleva cuatro años participando activamente en la promoción de la fiesta y en la concienciación medioambiental repartió un manifiesto en el que se demandó "compromiso" y al que dio lectura el portavoz de la asociación, Álvaro Tejerina. Demandó una "apuesta decidida por parte de los presentes y de los que no están aquí y deberían estar" y señaló que es el momento de "aupar" a esta fiesta "al lugar que se merece". Tejerina demandó un trabajo constante para poner en orden toda la documentación que acredite la antigüedad de la fiesta y fundamentar "un amplio informe técnico profusamente ilustrado y todo su bagaje histórico para hacer una petición formal a la Junta de Extremadura".

Asimismo, y debido a la coincidencia de la conmemoración hoy del Día Internacional de la Mujer Trabajadora ha habido también un recuerdo especial a todas las mujeres víctimas de violencia de género en el bosque de las ausentes con la plantación simbólica de árboles. La concejala del ayuntamiento, Antonia Aparicio, dio lectura a un poema que decía así: "Por cada mujer asesinada a manos de un hombre, cada árbol plantado forma un bosque. Sesenta y ocho vidas fueron cortadas, en este parque son recordadas. Si tú perdiste la vida por ser mujer, nosotras en tu nombre plantaremos un laurel. Día 8 de marzo, día Internacional de la Mujer Trabajadora, en Villanueva de la Sierra, día del árbol 1805-2011 206 años, pueblo donde nació el medio ambiente, plantamos vida contra la muerte. Porque nosotros nos vamos pero ellos se quedan para recordarnos".

La fiesta concluyó con un aperitivo que se sirvió en la nave municipal a base de embutidos de la tierra, tortillas de patatas, y se sirvió un vino de honor. En un principio se había planificado la celebración de la fiesta, como cada año, en la plaza de España, pero debido a la lluvia, el viento y el frío, el ayuntamiento decidió trasladar los actos al pabellón donde se congregaron decenas de personas para celebrar la fiesta del árbol.