Esta misma mañana han comenzado los trabajos de instalación del andamiaje en el número 20 de la Avenida Pureza Canelo de Moraleja para realizar los trabajos de restauración del edificio, recuperar la fachada y evitar que vuelva a caer cascotes y ladrillos a la vía pública como ya ha sucedido en dos ocasiones, la última el pasado jueves día 17.

Construcciones Revelo será la empresa encargada de acometer los trabajos, que a su vez ha contratado a Cerrajería Fuentes que se está encargando de la instalación del andamio. Por ello Fuentes ha encargado a la empresa Alquimérida la colocación de un andamio con plataforma elevadora en la calle Pío XII y se prevé que mañana viernes al mediodía puedan concluir estas tareas. En la otra calle afectada, la Avenida Pureza Canelo, será necesario instalar un andamio tradicional manual hasta el primer piso para salvar los árboles de la acera, y a partir de la primera cornisa se colocará la misma plataforma automática para trabajar en esta otra parte de la fachada.

Fuentes realizará prácticamente el 90% de la obra y colocará unas sujecciones de hierro como soporte en la balconada de las cinco plantas para evitar el desprendimiento de la cornisa. Una vez finalizados estos trabajos, Construcciones Revelo revisará todos y cada uno de los ladrillos de la fachada, reparando los que se hayan roto, y fijando los que estén desprendidos o a punto de caerse. Previsiblemente las obras estarán terminadas en un mes.

Dos derrumbes sin daños 

La comunidad de vecinos del inmueble tomó la decisión de acometer una reforma integral de la fachada tras el primer derrumbe el pasado 11 de enero. Un nuevo susto sobresaltó a los vecinos la semana pasada cuando aún no se habían iniciado estas obras. La comunidad de propietarios solicitó hace algunas semanas el presupuesto a varios profesionales para arreglar los desperfectos de los balcones y cornisas del edificio.

En el último derrumbe cayó sobre la acera aproximadamente metro y medio de cornisa de la segunda planta sin que afortunadamente hubiera que lamentar daños personales. También el pasado 11 de enero, unos ocho metros de cornisa de este mismo edificio, pero correspondientes a la tercera planta, caían sobre la calzada y originaban un gran susto a los vecinos.