Más de 1000 personas han tomado parte en el simulacro internacional de protección civil que ha organizado la Dirección General de Justicia e Interior de la Junta de Extremadura, en colaboración con el Gobierno de Portugal.

Además de los profesionales de Protección Civil de la Consejería de Administración Pública, en los escenarios del simulacro que se han llevado a cabo en suelo español, han colaborado entre otros cuerpos, la Cruz Roja; Unidad de Control Radiológico de la Junta de Extremadura; Unidad Militar de Emergencias BIEM I; SES; Consorcio Extremeño de Transporte Sanitario; asociación DYA de Extremadura; CCFF de Seguridad del Estado en misión de policía judicial; el grupo de rescate acuático de la Guardia Civil y el CCFF de seguridad del Estado en misión de grupo de seguridad.

También han colaborado el Instituto de Medicina Legal de Cáceres y Badajoz; las agrupaciones de voluntarios de Protección Civil de diferentes localidades y los ayuntamientos de Almaraz, Navalmoral de la Mata, Romangordo y Valdecañas de Tajo. En este simulacro también han participado, además de autoridades locales, un gran número de personas que han colaborado en haciendo de víctimas y prestándose para dar más realismo al ejercicio.

Este simulacro, como ha señalado el Consejero de Administración Pública, Ángel Franco, parte de un escenario irreal para nuestra región, ya que el punto de inicio es un movimiento sísmico de 7,8 en la escala Ritcher, un riesgo inexistente en nuestra región, ya que la única zona con riesgo sísmico en Extremadura es el sur de la provincia de Badajoz

La Dirección General de Protección Civil ha querido plantear una catástrofe simulada lo suficientemente importante como para involucrar a todos los cuerpos y operativos de Protección Civil, activar gran parte de los planes de emergencia de la región e involucrar al país vecino Portugal.

Así, el seísmo producido origina una rotura en la presa de Valdecañas, lo que produce una gran corriente de agua que se desplaza hasta Portugal, produciendo a su paso numerosos incidentes con afectación de 82.005 personas, muchas de ellas muertas o heridas y numerosos daños materiales y medio ambientales.

En la evaluación que se ha llevado a cabo tras el ejercicio, las autoridades han destacado el realismo de los escenarios planteados en el simulacro. Los asistentes han podido conocer muy de cerca la labor de los distintos cuerpos intervinientes en una catástrofe de estas dimensiones.

En los escenarios se ha procedido al rescate, la atención de heridos, la identificación de fallecidos y la recuperación de bienes inmuebles.
Algunos de los ejercicios más llamativos han sido el recate de victimas por derrumbamiento de viviendas, víctimas atrapadas en vehículos en el cauce del río, rescates en helicóptero, búsqueda de afectados con perros y extinción de locales en llamas, además de ver como se trabaja en puestos de socorro y atención sanitaria, entre otros.

El consejero de Administración Pública y Hacienda, además de agradecer el trabajo y colaboración de todos los que han intervenido, ha señalado la importancia de ejercicios como este que ponen en valor el trabajo de los equipos de emergencias.

Además, este simulacro ha supuesto un excelente ejercicio práctico para los que han tomado parte. En este sentido, las autoridades han coincido en señalar la buena coordinación y comunicación que ha habido entre los distintos equipos en todo momento y que ponen de relieve que nuestra región está preparada para hacer frente a una situación de catástrofe real.