Bajo el impulso de las asociaciones del entorno rural de Cáceres, Sierra de Gata, Las Hurdes, el Valle del Ambroz, La Vera y Monfragüe se ha celebrado en Caminomorisco la primera Junta Directiva de la Federación de Turismo Rural de Extremadura, Fextur, con el objetivo de marcar un punto de inflexión en la actitud de del turismo rural extremeño.

Estas asociaciones se ha conjurado para poner rumbo a un solo destino: la promoción turística de Extremadura a través de lo mejor la región: "la Extremadura rural, la verdadera pata negra de nuestra oferta turística".

Este impulso se materializará en los próximos días en acciones que reclamarán la atención de la demanda en el sentido más amplio de la palabra. El proyecto que se puso en marcha "en la Junta de las Hurdes" tiene el propósito de hacer frente a la responsabilidad de liderar la presentación de patrimonio y su comercialización desde plataformas abiertas, de modo que cada comarca pueda presentarse con sus mejores criterios y a su vez convivan con las demás en un pulso constante de competitividad e innovación. El resultado será siempre beneficioso para el conjunto del sector y el comienzo de su mejor posicionamiento social.

Hay otros aspectos que serán consecuentes con esta novedosa orientación, como los de impulsar la cultura hacia la profesionalización del sector o la inevitable batalla que tendrá que librarse para salir fortalecidos de este periodo de crisis social y económica.

Algo le tocará también en este nuevo reparto a la administración autonómica, "pues tendrá que mirar de otro modo a las casitas rurales y promediar su oferta pública para salir del círculo de las desleales competencias". Con todo, la apuesta es por el medio rural y la supervivencia en el territorio, al que habrá que custodiar porque es aquí donde se cría la verdadera pata negra extremeña.