La Fundación Félix Rodríguez de la Fuente (FFRF) y la Real Federación Española de Caza (RFEC) han acordado luchar conjuntamente contra el uso ilegal del veneno en el medio natural, incluso ante los tribunales, dentro de una serie de acuerdos que promueven la defensa de la biodiversidad. Cazadores y proteccionistas muestran así su firme voluntad de acabar con acciones minoritarias que están poniendo en grave peligro de extinción a numerosas especies protegidas.

"Con estas actuaciones que comprometen aún más a la Federación contra el uso del veneno, los cazadores dan un paso histórico en su interés por la protección de la naturaleza y el desarrollo sostenible del mundo rural". Así lo ha destacado la directora general de la FFRF, Odile Rodríguez de la Fuente, cuyo padre, el célebre naturalista Félix Rodríguez de la Fuente, hizo a lo largo de toda su vida una decidida apuesta por la erradicación del uso de cebos envenenados en el campo.

Por su parte, el presidente de la Real Federación Española de Caza, Andrés Gutiérrez, ha remarcado que "este tipo de ponzoñas son usadas por una minoría de indeseables delincuentes, quienes con su incívica actitud mancillan el buen nombre de la inmensa mayoría del colectivo". Además, ha añadido que "los cazadores somos los primeros interesados en desterrar el uso de unos productos que desequilibran los ecosistemas y ponen en peligro nuestra salud y la de nuestros animales".

El veneno es una de las principales causas de mortalidad para algunas de las especies más amenazadas de la fauna ibérica como águilas imperiales, osos pardos, buitres negros, quebrantahuesos o alimoches. Se calcula que en los últimos quince años han muerto intoxicadas más de 20.000 aves rapaces de las cinco especies más amenazadas de España.

Dentro del compromiso de los cazadores por mantener y mejorar la biodiversidad española, la Real Federación Española de Caza se adhiere a la firma del "Pacto Contra el Uso Ilegal del Veneno". Esta iniciativa, promovida por las principales ONG conservacionistas del Estado y a la que ya se han adherido los ministerios de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y del Interior, junto a la mayor parte de las comunidades autónomas, sindicatos agrarios, SEPRONA y Colegios Oficiales de  Veterinarios, entre otros, pretende frenar de manera decidida el uso de cebos envenenados en el medio natural.

Además, la Federación se personará como acusación particular en determinadas causas judiciales de envenenamientos que por su relevancia sean ejemplarizantes.

En esta misma línea, ha editado las conclusiones del III Observatorio Cinegético de la RFEC relativo al veneno, celebrado en Archidona (Málaga).