Padres y profesionales de Aprosuba-9 de Villanueva de la Serena han asistido el pasado sábado, 24 de abril, al curso "Aprendemos Comiendo" que impartió la acreditada logopeda de la Asociación Fuensocial de Fuengirola (Málaga), Begoña Barceló.

La ponente explicó a los asistentes de qué se trata y en qué consiste la Terapia Miofuncional, en la que ella es experta. Según indicó, se trata de una rama dentro de la logopedia que aborda el conjunto de procedimientos, estrategias y técnicas, de evaluación, tratamiento preventivo y rehabilitador cuyo objetivo es evitar o corregir desequilibrios orofaciales que se producen por malos hábitos o por alteraciones estructurales congénitas o adquiridas.

Barceló destacó que "la dentición no es sólo un problema estético, sino también funcional, es decir, tiene repercusiones". Para ejemplificar de qué se tratan estos problemas, la logopeda explicó que si un niño respira por la boca en vez de por la nariz eso puede derivar en problemas de columna, de boca, de crecimiento de la mandíbula, etc.

Según resaltó la logopeda, se trata de problemas que están a la orden del día, pero, sin embargo, el resto de profesionales sanitarios no dan importancia. Por tanto, el primer impedimento con el que se encuentran los logopedas es que el pediatra no encuentra en estas afecciones un problema grave por lo que se "pasa por alto". Todo ello, desemboca después en desequilibrios, problemas dentales o maloclusiones (cuando los dientes no encajan bien).

De este modo, Begoña Barceló recomendó que se haga un seguimiento de la zona bucal desde que los niños son pequeños, en lugar de esperar a que tengan 12 ó 13 años que es la edad en que empiezan a acudir al ortodontista. Así, se haría un seguimiento del desarrollo de la dentición, algo que repercute en la formación de los huesos y músculos de la cara.

Instrumentos para la alimentación

Otro de los puntos que trató Begoña Barceló durante el curso fue el uso de los diferentes instrumentos que se utilizan para alimentar a los niños, dónde también incluyó el uso del chupete.

Barceló destacó que para la formación de la musculatura facial, los utensilios que se usan para alimentar a los niños "son muy importantes". Pues hay que "aprovechar la alimentación para que el niño haga buenos movimientos con la boca".

En cuanto al uso del chupete y los biberones, la experta en Terapia Miofuncional, aseguró que "no son ni buenos ni malos", depende del uso que se le da. Según Barceló, "un niño deja de tener necesidad de chupeteo a los 6 meses", por tanto, a partir de esa edad hay que comenzar a retirar progresivamente el chupete y a introducir alimentos semisólidos en la dieta. Es decir, paulatinamente acostumbrar al niño a alimentarse con cuchara y vaso para sustituir el biberón.

Todo ello debe hacerse respetando el ritmo del pequeño. Así, señaló que "no tiene sentido" que haya niños de cuatro, seis u ocho años que se alimenten con el biberón o sigan usando chupete.

Por último, Begoña Barceló recomendó a los padres y profesionales que para alimentar a los niños "hay que tener sentido común, fijándonos en como lo hacían nuestras abuelas", pues indicó que "hasta ahora no ha habido problemas de alimentación como los hay en nuestros días" debido a las prisas, al ritmo de la vida actual.

El curso "Aprendemos Comiendo" ha sido organizado por el Centro de Atención Temprana perteneciente a Aprosuba-9. Esta formación ha sido financiada, en parte, por la Consejería de Sanidad y Dependencia de la Junta de Extremadura, y otra parte por nuestra asociación.