La Compañía Española de Tabaco en Rama (Cetarsa), estudia en estos momentos ejecutar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectaría a 120 trabajadores y obligaría a dejar sin producción la planta que esta entidad tiene en Coria, afectando en este caso a 80 trabajadores entre fijos, una veintena, y discontinuos, alrededor de 60. Además, también afectaría a 40 empleados del resto de la compañía. Así lo asegura Ángel Bodes, secretario general de CCOO en la sección sindical de Cetarsa.

La compañía está participada mayoritariamente por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) con cerca del 80 % del capital de la empresa. En este sentido, Bodes manifiesta que fue la SEPI la que trasladó a los sindicatos la necesidad de Cetarsa para llevar a cabo un reajuste para compensar la pérdida de ayudas. La gran perjudicada de ERE sería la ciudad de Coria, que cerraría su centro de producción. El sindicalista considera que esta postura no es de recibo, máxime cuando hace apenas un mes los datos hablaban de un aumento del 10% de las contrataciones.

Lo que plantearía la SEPI, según Bodes, son las prejubilaciones y las bajas incentivadas, algo que desde CCOO rechazan de manera rotunda , fruto, asegura, de la nefasta repercusión de la OCM en el sector. Bodes critica que en los últimos años se ha estado premiando a los cultivadores por no sembrar tabaco y sin embargo gente que lleva décadas trabajando en el sector industrial tienen que enfrentarse a una situación como ésta. El representante sindical de CCOO en Cetarsa incide en la necesidad de una búsqueda urgente de soluciones como sería un plan de reajuste 2010-2013. Además, apunta que cuentan con el compromiso de la Junta de Extremadura de no cerrar ninguna fábrica.

Bodes, no obstante, manda un mensaje para la esperanza a todos los trabajadores que puedan verse afectado y asegura que habrá movilizaciones para impedir que finalmente se lleve a cabo esta "levisva" regulación. Explica, además, que en la actualidad la compañía cuenta con 121 trabajadores en edad de prejubilación, siendo el 80% fijos discontinuos, por lo que critica que al ser trabajadores que "viven en un ERE permanente" a la empresa no le interesa darles salida.

Desde la dirección de Cetarsa, informan de que por ahora no se pronunciarán al respecto hasta no sacar las conclusiones pertinentes de la reunión del comité intercentros con los sindicatos que tendrá lugar este miércoles.