El Ayuntamiento de Villanueva de la Sierra vivió en la jornada de ayer una situación atípica, después de que los tres concejales del grupo popular decidieran encerrarse en el consistorio tras el pleno ordinario correspondiente al mes de marzo. Según el portavoz popular, Daniel Pérez, en el punto de ruegos y preguntas él mismo preguntó al equipo de Gobierno sobre los problemas del centro social con la carcoma, y tras la oportuna respuesta de la portavoz municipal uno de los vecinos irrumpió en el diálogo alterando el normal funcionamiento de la sesión.

Pérez, según manifiesta, pidió explicaciones al alcalde, quien, según manifiesta el popular, le llamó la atención como quien riñe a un niño riéndole las gracias. Cuando Pérez quiso intervenir nuevamente el alcalde dio por finalizada la sesión.

Según el acalde de la localidad, Francisco Javier Simón la situación se vivió de manera parecida a la versión de Pérez. Sin embargo, el regidor asegura no tener conocimiento de que los concejales del PP se quedaran encerrados en el consistorio hasta que no le llamó el secretario del ayuntamiento, por lo que decidió llamar a la Guardia Civil para que procediera a la desocupación.

Precisamente, el concejal Daniel Pérez lamenta que el máximo responsable del consistorio ni si quiera se reuniera con ellos para hablar y aclarar la situación, avisando directamente a la Guardia Civil.

Simón, no obstante, acusa al grupo popular municipal de no ejercer una hacer una buena oposición y de crispar la vida política de Villanueva de la Sierra constantemente.