Valverde del Fresno invertirá los 273.000 correspondientes a los fondos del II Plan E a desarrollar las segundas fases de los proyectos que se iniciaron con los fonods concedidos el pasado año, como son la construcción de un vial en el polígono industrial por valor de 158.000 euros y la finalización de un área sociocultural por un importe de 60.000 euros.

Así lo asegura la alcaldesa de la localidad, Ana Isabel Pérez Pérez, quien además mantiene que desde el Ayuntamiento destinarán otros 54.000 euros procedentes del plan a las prestaciones sociales, concretamente en los pisos tutelados dependientes de este municipio.

Las finalización de las obras del vial generarán nueve puestos de trabajo, mientras la segunda fase del área sociocultural se llevará a cabo con cinco trabajadores. En lo que se refiere a las prestaciones sociales, Pérez asegura que en este servicio ya trabajan cinco personas.

Otro de los proyectos en los que la localidad de Valverde del Fresno está inmersa es el de la carretera que une este municipio con Navasfrías. Según Pérez, esta actuación se encuentra en el momento de la redacción del proyecto, después de que varios técnicos de la Diputación Provincial de Cáceres visitaran la vía. La alcaldesa mantiene que la único que falta es la reforma de los últimos cuatro kilómetros, algo que podría ser una realidad a lo largo del año 2011. Según manifiesta, esta carretera pasará a mejorar sustancialmente las comunicaciones de los valverdeños con todas las localidades del norte de la provincia hasta el límite de provincia con Salamanca.

La regidora muestra también su satisfacción con lo que considera el mayor logro del equipo de Gobierno en esta legislatura, que no es otra cosa que el cambio de ubicación de la depuradora que un principio tenía prevista la Confederación Hidrográfica del Tajo. Pérez indica que después de algunas negociaciones han conseguido que esta futura depuradora, de la que actualmente se está estudiando la viabilidad en su nueva ubicación, no hubiera podido depurar toda la población en la ubicación que en un principio estaba prevista, algo que hubiera frenado en seco el desarrollo industral de Valverde del Fresno y hubiera supuesto penalizaciones por parte de la propia Confederación Hidrográfica del Tajo.