Agentes de la Guardia Civil han detenido a un vecino de Almendralejo de 61 años acusado de vender en un puesto aceitunas de procedencia ilegal. La detención se produjo cuando los agentes sorprendieron el pasado jueves y este lunes, a seis ciudadanos rumanos vecinos de Almendralejo cuando pesaban para su entrega en el puesto 1.000 kilos de aceitunas, de las que no pudieron acreditar su legal procedencia.

Tras la inspección realizada en el citado puesto, la Guardia Civil encontró 5.500 kilos de ese fruto, que no fueron asentados su entrada en los libros de registros del citado puesto.

   Así, con las gestiones realizadas y al no acreditar su legal procedencia, se detuvo a un vecino de 61 años de edad, vecino de Almendralejo y encargado del citado puesto, por un delito de receptación de aceitunas, presuntamente de procedencia ilegal, según informa la Guardia Civil en nota de prensa.

   Las diligencias junto con el detenido fueron puestas a disposición de los Juzgados de Instrucción de Almendralejo.

   Cabe recordar que la detención se enmarca en los controles que la Guardia Civil realiza durante la campaña de recolección de aceitunas, con el objetivo de evitar robos y hurtos de ese fruto en la provincia de Badajoz