Los padres del joven de 19 años apaleado en el Centro de Menores Marcelo Nessi de Badajoz se muestran "bastante satisfechos" porque se haya cambiado de módulo a los vigilantes de seguridad que supuestamente le propinaron la paliza a su hijo, pero solicitan que se tomen "más medidas" al respecto y que se les "eche del centro" definitivamente.

Así lo expusieron a Europa Press Televisión desde su domicilio de Badajoz, donde explicaron que esta tarde recibieron una llamada desde la Junta de Extremadura en la que, según apuntaron, les comunicaron que "han apartado" de sus funciones en el módulo terapéutico, en el cual permanece su hijo, a los vigilantes de seguridad que aparecen en la grabación.

   Para la madre, Visi Guerrero, quien reconoce que no para "de llorar" al ver las imágenes en las que "se ensañan" con su hijo, no hay justificación alguna para "pegarle a un niño así" y asegura que no se sentirán aliviados hasta que no "dejen sin trabajo" a quienes le causaron "moratones" y otras lesiones, "sin motivo alguno", a su hijo.

   Asimismo, esta mujer indicó que cuando su hijo les contó lo ocurrido ya sabía que existía una grabación de lo acontecido. "Mira mamá lo que me han hecho. Está grabado, voy a seguir adelante y haced vosotros todo lo que podáis" ya que no hay derecho, ni ha habido motivo para hacerme lo que me han hecho", según explican los padres que les comunicó semanas después de la paliza.

   También recordó su madre que al tratar de solicitar un médico le negaron la asistencia, pese a que "estaría para darle algo" pues tal y como indica su progenitora el joven es "muy nervioso" y además presentaba lesiones y moratones "en cara y piernas".

   La madre agregó no es la primera vez que se proudcía un comportamiento así hacia el joven interno, ya que "le han pegado varias veces más" e incluso "le ponen grilletes y sale con las manos moradas". Pese a ello, esta mujer reconoce que la víctima "está a gusto en el centro" y atribuye lo ocurrido a que el vigilante que comenzó a apalearlo "le tiene manía".

   Para su marido, Ceferino Vázquez, quien expresó que les "satisfacía bastante" la decisión de apartar a los vigilantes del modulo de su hijo, "personas así no deben estar a cargo de críos" y "más hacer lo que han hecho" con su hijo y "otros internos", apostilló. Por ello, espera que "no vuelvan a ocurrir" hechos parecidos y que se "tomen otras medidas" para controlar a los internos.

   En cuanto a la situación de su hijo, indicó que han "notado un gran cambio en él" respecto a su "comportamiento y educación" que les parece positivo, por lo que agradecieron la labor que realiza con su hijo los terapeutas que lo están tratando. "Hay gente mala, pero también gente buena", sentenció.