Tres de cuatro mujeres que ejercen la prostitución en Extremadura lo hacen "bajo presión, engaño o coacción" de grupos organizados para la explotación sexual, según indicó la delegada del Gobierno, Carmen Pereira.

"No es el oficio más viejo del mundo, el delito más viejo del mundo es la violencia de género y la explotación sexual de las mujeres", subrayó Pereira durante una rueda de prensa posterior a la Junta de Seguridad Regional, en la que se abordó el recorrido en la región del Plan Integral de Lucha Contra la Trata de Blancas, aprobado por el Gobierno en diciembre del año pasado.

   Carmen Pereira precisó que en Extremadura el 96% de las prostitutas son extranjeras, un porcentaje superior en 6 puntos al promedio nacional del 90%. Además, en el 4% de españolas abundan las que se prostituyen porque son "víctimas de otra dependencia, que son las drogas".

   En la región, según estimaciones de la Delegación del Gobierno, ejercen la prostitución 2.000 mujeres, 1.500 de ellas en los 58 clubes de alterne existentes (27 en la provincia de Badajoz y 31 en la de Cáceres) y el resto en pisos particulares, mientras que en la calle "la incidencia es mínima" y ligada a las grandes poblaciones. Pereira precisó que este año hay 200 mujeres más ejerciendo en pisos que en 2008, mientras que, en cambio, el número de clubes ha disminuido.

EUROPA DEL ESTE Y ÁFRICA

   Respecto a la procedencia, desde que Rumanía y Bulgaria ingresaron en la UE ha habido un incremento significativo de las mujeres procedentes de estos países, que se unen a las iberoamericanas –sobre todo brasileñas– y marroquíes. También se ha sumado últimamente las nigerianas, muestra de ello es la operación Mammy Destiny, todavía en curso, en la que, en Badajoz y otras provincias españolas, ya se han detenido a 29 personas que traficaban con mujeres de dicha nacionalidad.

   En total, desde marzo de 2008 se han llevado a cabo ocho operaciones exitosas contra la trata de blancas y la explotación sexual en Extremadura, con el resultado de más de medio centenar de detenciones.

   Subrayó Pereira que la novedad que incorpora el último plan del Gobierno es que a las prostitutas que están irregularmente en el país se les concede ahora una periodo de 30 días para "reflexionar" y decidir si quieren colaborar con la Policía o la Guardia Civil para desarticular a las mafias.

   Además, pueden recibir asistencia jurídica y apoyo económico y humano, tarea en la cual es fundamental la colaboración de ONGs y entidades cívicas. En Extremadura dichos apoyos están recogidos en el denominado Plan Asteria, que hoy presentó ante la Junta Regional de seguridad el Instituto de la Mujer de Extremaura.