El Instituto Europeo de la Salud y el Bienestar Social ha reconocido en Badajoz, con la concesión de unos de sus premios a la Excelencia Sanitaria, la labor del presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, durante sus 12 años como consejero de Sanidad, para convertir al sistema sanitario extremeño en un referente a nivel nacional.
Vara recogió ayer el galardón en el Colegio Oficial de Médicos de Badajoz, en un acto institucional en el que estuvo acompañado por los otros dos galardonados por el citado Instituto Europeo, los doctores Francis Montané y Alfonso Moreno, y que también contó con la presencia de la consejera de Sanidad y Dependencia, María Jesús Mejuto y el presidente del Instituto Europeo de la Salud y el Bienestar Social, Manuel de la Peña, entre otras autoridades.
Manuel de la Peña destacó en su intervención el trabajo del jefe del Ejecutivo regional para lograr que el modelo asistencial extremeño se haya convertido en un "referente nacional al que miran otras regiones, por su mejora continua, la participación de las asociaciones de pacientes" entre otros factores.
Por su parte Fernández Vara subrayó que los méritos del sistema sanitario y asistencial de Extremadura se basan en los principios de "cohesión e innovación" para que la asistencia llegue a todas partes, además de la importancia dada a factores como las nuevas tecnologías, las personas sobre las enfermedades y la formación de los profesionales.
Sobre este aspecto de la formación profesional de los médicos el presidente de Extremadura insistió en la necesidad de buscar nuevos caminos para que los MIR no se conviertan "en mercenarios" del sistema sanitario, que una vez formados se van a otras regiones donde pagan más sin "devolver" a la sociedad en la que se forman "ni un poquito" del esfuerzo hecho para sufragar esa formación. Para abordar este problema dijo que es fundamental compaginar "formación y diálogo".
FLUJOS MIGRATORIOS
Por su parte, Francis Montané fue reconocido por su labor en la UE en materia de la movilidad asistencial de los pacientes y el acceso en condiciones de igualdad a nuevas tecnologías e información.
Montané habló en su intervención sobre las consecuencias de los flujos migratorios de profesionales médicos que a nivel europeo se producen de países del este al oeste y a nivel mundial del sur al norte, unos flujos que, apostilló, deben controlarse para que las poblaciones de origen de los profesionales no queden desasistidas.
Finalmente, el catedrático de Farmacología Alfonso Moreno destacó que el perfil del médico del futuro debe dar prioridad al enfermo sobre la enfermedad y sobre todo tener un "compromiso" con el paciente, de forma que el profesional médico "responda a lo que la sociedad demanda".
