En las próximas semanas estará terminado lo que el concejal de Tráfico y Movilidad, Francisco Martín, califica como "el nuevo proyecto de zona azul del siglo XXI", que persigue "seguir vaciando el centro de coches y reubicar estas plazas en la zona de contacto", según avanzó el edil.

Es la filosofía de una nueva zona azul que está ultimando la concejalía con la elaboración de un nuevo pliego de condiciones. Martín tiene claro que el nuevo sistema debe priorizar las plazas de zona azul en espacios situados extramuros para continuar así la política de dejar libres de vehículos los monumentos y zonas intramuros.

De ahí que Martín subraye que en zonas como la plaza de San Calixto y avenidas como las de Juan Carlos I y La Salle "no están agotadas todas las posibilidades de zona azul". Pero además, apunta sus intenciones respecto a la ronda Higuerillas: "Si hay zona azul en San Calixto, que está más lejos de la plaza Mayor, por qué no puede haberla en Higuerillas?". De momento, sin embargo, no hay nada decidido, mientras los vecinos de la ronda mantienen su tajante oposición al proyecto.

Otra novedad que el edil se está planteando para la nueva zona azul es llevar a determinadas partes de la ciudad la denominada zona verde, que supone "que el tiempo de estacionamiento es más corto y agiliza más la rotación de vehículos, pero también es algo más cara".

A todo esto sumó su intención de que el sistema esté coordinado con la grúa municipal "para que uno no pueda aparcar en una plaza y dejar el coche ahí toda la mañana".

 

PIDE CONSENSO A PP Y UPEX El concejal ha aprovechado para pedir al PP y a su socia de gobierno –que siempre se ha opuesto a la zona azul– que apoye este nuevo sistema. Respecto al PP, dijo esperar "un consenso porque sería contradictorio a la idea que ya tuvo en 1997 con la zona azul, pero que tuvo una malísima ejecución porque llenó el casco histórico de coches".

Además, defendió la salida de estos del centro para favorecer al peatón, la actividad comercial y la "economía del turismo".