El sindicato Anpe ha presentado en Cáceres la figura de 'Defensor del profesor' que tendrá como misión atender psicológicamente, en una primera instancia, a docentes asociados o no, que como causa directa del desarrollo de sus funciones sufran episodios en sus centros escolares de agresiones verbales, físicas, o presenten síntomas de stress, ansiedad o depresión.

Igualmente en este servicio se atenderá, de forma gratuita, todas las consultas que en definitiva tengan que ver con el normal funcionamiento de la labor docente, así como la falta de apoyo por parte de los equipos de dirección de los centros ante conflictos que puedan surgir, o problemas con los padres de los alumnos. Los datos serán tratados con rigurosa confidencialidad y en caso de que sea necesario, un asesor de Anpe actuará como mediador.

El 'Defensor del profesor', que en Cáceres será coordinado por Beatriz Berrocal, fue una figura que se creó en la Comunidad Autónoma de Madrid en noviembre de 2005 y que en la provincia de Badajoz funciona desde 2006, habiendo recibido desde entonces 112 consultas, 40 de ellas durante el curso pasado. En toda España han sido ya 9.000 las llamadas registradas desde que se puso en marcha hace poco más de tres años.

Todos estos datos los dio hoy a conocer el presidente de Anpe Cáceres, José Francisco Venzalá, que ofreció una rueda de prensa acompañado por el presidente nacional, Nicolás Fernández; la secretaria de Comunicación del sindicato, Carmen Guaita, y el presidente de Anpe Extremadura, Antonio Vera, quienes estuvieron hoy en la capital cacereña arropando la puesta en marcha de este servicio que a partir de mañana prestará el sindicato en la provincia.

Algunas de las cifras que puso encima de la mesa Venzalá fue que, según los datos del curso 2007/2008 que son los últimos que manejan, el 14 por ciento de las bajas de los profesores de la provincia son debido a causas psíquicas y los días de baja de origen psicológico suponen el 20,12% respecto del total de jornadas de baja de profesores.

PROBLEMAS PARA DAR CLASE

Respecto al tipo de problemas con los que se enfrenta el profesorado, según las llamadas registradas el curso pasado en el sindicato, cabe destacar que el 72 por ciento de los que llamaron lo hicieron por problemas para dar clase causados por falta de interés por parte del alumnado, continuas interrupciones en las explicaciones de los contenidos, y faltas de respeto hacia los profesores en caso de llamarles la atención.

El 8 por ciento de las consultas estaban relacionadas con problemas de acoso o amenazas, mientras que un 1% era debida a una agresión por parte de un alumno a un profesor. Además, el 15% tenía que ver con casos de acoso y amenazas de padres y familiares, y un 3,5% por falta de respaldo de la administración educativa al profesor.

Además, según explicó el presidente nacional de Anpe, Nicolás Fernández, han aumentado "de forma considerable" los problemas relacionados con el "mal uso de las nuevas tecnologías", ya que el 10% de los casos de acoso tiene que ver con grabaciones a través de los móviles, que son "fáciles de conseguir y de difundir".

Este deterioro de la convivencia en las aulas ha venido provocado en los últimos años, según Fernández, por un "abandono de la responsabilidad educativa por parte de algunos padres", así como una "ausencia de normas educativas claras" con "una estructura obsoleta" sobre todo en la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) que es donde, según los datos que se manejan, "estas conductas se manifiestan con mayor virulencia", y en especial en 1º de la ESO, según las estadísticas más recientes.

Desde el sindicato se aboga por recuperar la "autoridad" de los profesores y que se articulen medidas correctoras de las conductas contrarias a la convivencia que deben recibir "un reproche inmediato". Así, Fernández apostó por la creación de 'Comisiones de disciplina' en los centros para que los alumnos que deterioren la convivencia sean atendidos de forma individualizada dentro de un plan de rehabilitación de su conducta.

De hecho, Anpe promovió ante la Fiscalía General del Estado que la agresión a un profesor en el ejercicio de su labor fuera considerada como un delito de atentado a la autoridad y ya hay varias sentencias, alguna en la provincia de Cáceres, que corroboran este hecho.

Pero además el presidente nacional de Anpe se refirió también a la "autoridad moral" de los docentes, que "muchas veces ven cuestionadas sus decisiones", tarea para la que conminó a los padres, "a los que también hay que mentalizar de que es preciso corregir estas conductas", para que colaboren con los docentes y el centro.

SÍNDROME DEL QUEMADO

Para solucionar las situaciones que se viven en las aulas y que están provocando el conocido como 'Síndrome del quemado' en muchos profesores, el sindicato pide a la administración educativa que se ofrezca amparo legal a los docentes y que se cambie el modelo educativo diseñando una nueva estructura que garantice la eficacia educativa para los alumnos que no pueden, por su situación personal o social, capacidades o actitudes, ajustarse a la vía ordinaria.

Además reivindican que los docentes reciban preparación para la resolución de conflictos y que se haga llegar a las familias, a través de las Consejerías de Educación, la normativa de derechos y deberes en materia educativa, así como que los colegios difundan entre los padres los reglamentos de régimen interno y se diseñen protocolos de actuación para cuando surjan estos conflictos de alteración de la convivencia.

Según Fernández, "los padres y los alumnos deben conocer las normas del centro para hacérselas cumplir a sus hijos y para saber a qué se atienen en caso de que éstas se inculquen", concluyó. Los teléfonos del 'Defensor del profesor' en la provincia de Cáceres son 927 62 60 78 y 699 52 66 70. También se pueden hacer consultas a través del correo electrónico defensordelprofesor@anpecaceres.org. Esta dirección de correo electrónico está protegida contra los robots de spam, necesita tener Javascript activado para poder verla