El proyecto Intramuros, eje de la candidatura de Cáceres 2016, inicia el proceso para la reapertura de locales cerrados en el centro históricos con la primera fase de actuación en 16 inmuebles de la plaza Mayor, la calle General Ezponda y la plaza de la Concepción. Esta iniciativa, que contempla intervenir en un total de 33 locales de otras calles como Moret o Cruz, se plantea como objetivo primordial "reactivar la economía, el comercio y la hostelería" del casco histórico, donde el cierre y el abandono de edificios han ido en aumento en la última década.

Como primer paso antes de definir qué destino tendrá cada local, el consejero delegado del Consorcio Cáceres 2016 para el proyecto Intramuros, Felipe Vela, ha mantenido un encuentro con los propietarios para transmitirles el contenido de esta actuación, que cuenta con un presupuesto de un millón de euros destinados a financiar las subvenciones que recibirán los dueños para reabrir sus locales.

 

ANALISIS A FONDO En esta primera fase, el proyecto fija como prioridad "un exhaustivo estudio" de la situación actual de los inmuebles que sirva para complementar la remodelación de la plaza Mayor, prevista desde abril de este año, donde se eliminará la bandeja central, se renovará el pavimento y habrá nuevas terrazas en los establecimientos. Estas actuaciones, que no concluirán hasta el segundo trimestre del 2010, cuentan con un presupuesto de 3,5 millones de euros.

La hoja de ruta del proyecto de restauración y revitalización funcional del centro histórico, adjudicado en septiembre del año pasado a Placonsa y Pronorba por 308.750 euros, fija como primeras tareas la elaboración de un estudio técnico de cada uno de los locales, además de mediciones, un plano del estado actual, la revisión de las instalaciones y sus acometidas, así como el resto de condiciones físicas. Estos trabajos, que ya han comenzado tras la entrega de las llaves por parte de los propietarios, se prolongarán durante las próximas semanas para poder elaborar un estudio integral de cada uno, "atendiendo a criterios poblacionales, comerciales, económicos y sociales, con el fin de determinar qué negocio es el más adecuado", según informan fuentes de Intramuros.

La última parte de este proceso, sin plazo aún, consistirá en definir la forma de explotación de los nuevos negocios, para la que se pretende "combinar la búsqueda de inversores privados que quieran instalarse en la zona con el interés personal de los mismos propietarios". Vela recordó que esta actuación se completa con una serie de medidas destinadas a revalorizar el resto de espacios y negocios del centro histórico, entre ellas la implantación de una firma de hostelería, y advirtió de la importancia de abrir locales conjuntamente y no de forma aislada.