Los alumbramientos practicados mediante cesáreas en el hospital de Mérida han crecido de forma considerable en los últimos años. Según los datos facilitados por el Servicio Extremeño de Salud (SES), durante el 2008 hubo 1.698 partos, de los en 521 fue necesaria una cesárea. Solo un año antes esta operación quirúrgica se practicó en 461 de los 1.663 partos.

Lo cierto es que el número de nacimientos no ha dejado de crecer y eso provoca que también lo hagan las cesáreas practicadas. Así, en el 2005 en el hospital se atendieron 1.602 alumbramientos, de los que 380 fueron por cesáreas. En el 2004, esta operación se empleó en 329 de los 1.495 partos.

Esto significa que en los últimos cuatro años esta práctica ha pasado a ser necesaria en apenas el 20% de los casos a superar el 30%. Si nos vamos más allá, en el año 2002, en el hospital nacieron 1.325 bebés, de los que 268 lo hicieron después de una intervención quirúrgica a la madre. Por tanto, entre el 2002 y el 2008 los nacimientos por cesárea se han incrementado en más de 250 casos, aunque hay que tener en cuenta que han nacido 373 niños más el pasado año que en el 2002.

A este repecto, cabe destacar el notable incremento de los alumbramientos en los últimos años en el área sanitaria de Mérida y la utilización de la anestesia epidural, que ya la emplean ocho de cada diez mujeres para dar a luz. Es una una opción de las madres para evitar el dolor del parto y por la que se reduce la sensibilidad de la parte inferior del cuerpo. Los datos demuestran que se producen una media de casi cinco nacimientos cada día en el hospital, uno más diario que hace seis años.