CSI-CSIF Extremadura ha mostrado su apoyo a la decisión de los jueces extremeños de hacer huelga el próximo 18 de febrero y celebró que, "por primera vez", se unan al resto de trabajadores de los juzgados para criticar lo que "realmente" está pasando en la Administración de Justicia y que, a juicio del sindicatos, es "un mal funcionamiento y la necesidad de arbitrar medidas que solucionen el colapso que sufre el poder judicial".

 

A este respecto, el sindicato a través de un comunicado de prensa, señaló que CSI-CSIF confía en que esta huelga de jueces sirva "de una vez por todas" para afrontar la reforma de la Administración de Justicia y alcanzar el consenso para la nueva Oficina Judicial -Cáceres será "ciudad piloto" de este proyecto-; un "empeño" en el que también "estuvieron y están implicados" los colectivos de funcionarios de justicia.

   Para CSI-CSIF, el objetivo que se tiene que conseguir "por el bien de todos" es el de avanzar en la consecución del conjunto de medios personales, materiales y tecnológicos, como resultado de una "ambiciosa reforma" para adaptar la Justicia a los "nuevos tiempos y necesidades, frente a una estructura que se ha quedado obsoleta". En cualquier caso, CSI-CSIF "comparte con los jueces la necesaria e improrrogable reforma integral de la justicia extremeña".

   "Eso sí, para lograrlo también creemos que es necesaria la implicación de la Junta de Extremadura presionando al Ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, para que agilice el proceso de transferencias a nuestra comunidad y que sean una realidad a lo largo de este año 2009. Estamos convencidos que con la gestión de los medios materiales y humanos a cargo del Ejecutivo regional se contribuirá al mejor funcionamiento de esta administración tan importante para el conjunto de ciudadanos", concluyó.