La Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural se ha fijado un objetivo para el 2009: el mantenimiento del cultivo de tabaco en Extremadura. Después de un año en el que se buscó la unidad política y social para lograr que la estrategia agrarias europea incluyera las ayudas al tabaco en la agenda de la PAC, cuyo chequeo fue ayer definitivamente aprobado en Bruselas, el consejero del ramo, Juan María Vázquez, asegura que se está trabajando junto al Gobierno central en la adopción de una serie de medidas que garantizarán la rentabilidad de este cultivo, del que dependen unas 20.000 familias en el norte de Cáceres, al menos durante los próximos "cinco o seis años".

En una rueda de prensa en la que analizó las actuaciones de su departamento el pasado año, y en la que avanzó las líneas de trabajo para 2009, señaló que trabaja "codo con codo" con el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino para "ofrecer a los cultivadores de tabaco un marco de apoyo" que contemplará "subvenciones importantes" para la construcción de secaderos de biomasa, que "ahorrarán considerablemente los costos e incrementarán la calidad" del producto.

Asimismo se impulsará un plan de modernización de las instalaciones de la Compañía Española de Tabaco en Rama (Cetarsa) con el mismo fin, mejorar la calidad y ahorrar costes, así como la firma de acuerdos con las multinacionales tabaqueras (Altadis, Phillip Morris,…) que "garanticen un escenario de al menos cinco o seis años, que den pie a los productores a lanzarse a la puesta en marcha de inversiones".

Pero esta visión tan optimista no es compartida por todo el sector. La organización agraria Asaja planteó un panorama mucho más negativo para los tabaqueros extremeños. Su presidente, Angel García Blanco, vaticinó ayer que con la aprobación definitiva de la PAC la desaparición del cultivo del tabaco y el cierre de Cetarsa serán inminentes, y concretamente en el 2010.

Para evitarlo, desde Asaja aseguran que la única opción pasa por destinar a este sector, a través de un programa agroambiental, los 154 millones de euros que llegarán a la región en ayudas para desarrollo rural.