Existen razones en la situación de la justicia como para que los jueces planteen protestas, incluida la huelga? De existir, ¿tendrían derecho los jueces a hacerla? Y frente al argumento de quienes afirman que todo lo ha motivado el conocido como caso Tirado , ¿se habría llegado a esta convocatoria de protestas y huelgas de no haber existido dicho caso? Son solo una muestra de las preguntas que muchos se hacen ante la posible huelga de jueces anunciada para el 18 de febrero y que hace unos días se planteó a diferentes miembros de la judicatura extremeña. El resultado, una coincidencia unánime a considerar que las protestas y reivindicaciones de los jueces son justificadas, y división en cuanto a la conveniencia de la huelga.