El proyecto que permitirá que el río Guadiana a su paso por Mérida tenga playas fluviales y un barco de recreo, entre otras infraestructuras, ya está terminado y será presentado en las próximas semanas, según avanzó el alcalde de Mérida, Angel Calle, en una entrevista realizada por Europa Press. La reconversión del río se hará en el tramo entre el puente Lusitania y la desembocadura del Albarregas, y contempla, tal y como ya dijo el edil hace meses otras actuaciones para que los ciudadanos disfruten del río, entre ellas áreas de juegos y restaurantes.

Además, el curso fluvial acogerá un barco de recreo turístico que transitará hasta el puente Nuevo, con monitores a bordo que explicarán a los viajeros el patrimonio de flora y fauna que posee el río a su paso por la capital extremeña.

El objetivo, explicó Calle, es "hacer más humanizable el río", de modo que los ciudadanos puedan estar "en contacto con el cauce fluvial, sin que ello implique cambiar la fisonomía de zona verde" que le es propia. Por tal motivo, se crearán en el tramo citado playas artificiales, establecimientos hosteleros, y áreas de juegos, de manera que los emeritenses y visitantes tengan lugares donde comer o tomar un refresco mientras contemplan el río y dejan jugar a sus hijos junto al curso fluvial.

El regidor emeritense también concede especial relevancia a la relación futura con Portugal, la cual desea transcurra por una "doble línea". Por un lado, de tipo empresarial, "uniendo iniciativas de empresarios portugueses y españoles"; y por otro, haciendo hincapié en el aspecto cultural a través del próximo hermanamiento con Evora y los proyectos comunes con la localidad lusa.

"Las relaciones con Portugal tienen que ser como debían ser y no han sido nunca en el caso de la ciudad de Mérida; aquí nunca ha habido una relación estrecha con Portugal más allá de alguna colaboración en algún proyecto pequeño", se lamenta Calle, quien se muestra dispuesto a revertir esta situación. Así, anunció que empresario del país vecino están "dispuestos a desarrollar de un modo importante el centro regional de transportes", futuro "puerto seco de mercancías", hasta el punto de aportar "incluso su capital" propio en este proyecto.

El jefe del gobierno local señaló que los empresarios lusos "consideran que la ubicación estratégica de Mérida en el centro de la región a efectos de distribución de mercancías tiene un valor fundamental". Hasta la fecha se han producido tres reuniones entre estos hombres de negocios y el alcalde, que ya ha transmitido estas intenciones a la Entidad Pública Empresarial del Suelo (Sepes).

Calle dijo que en esta legislatura "se podrá acceder a adquirir un número importante de hectáreas para convertir el centro regional de transportes en un puerto seco de distribución de mercancías", en el que habrá "una aportación importante de capital portugués".

En cuanto a las acciones conjuntas con Evora, el edil recordó la dotación económica de los fondos europeos Interreg, si bien este ha suscitado un problema al destinar medio millón de euros a Mérida y sólo 75.000 a Evora. Dado que ambas ciudades han de aportar un porcentaje similar de su dotación –el 25%– Evora consideró abandonar el proyecto, lo cual hubiera supuesto la pérdida de la subvención para Mérida. Sin embargo, dijo, los esfuerzos del concejal de Cultura, Julio César Fuster, al "apostar desde el punto de vista cultural en la ciudad de Evora", han permitido mantener la relación y los proyectos conjuntos entre ambas localidades en torno a su dimensión histórica y a su futuro hermanamiento.

En el terreno cultural, el alcalde insiste en convertir a Mérida en una ciudad "referencia en cine", potenciando iniciativas como el reciente Festival de Cine Inédito y otros aspectos. Así, existe un proyecto para crear una escuela de cine en los terrenos del antiguo cuartel Hernán Cortés, y que pueda servir incluso de "reciclaje" para los profesionales que trabajan en el sector.