Los trabajadores del servicio de limpieza y la empresa mixta Cespa llegaron a un acuerdo previo para firmar un nuevo convenio colectivo en la última reunión que mantuvieron ayer, según informaron ambas partes en una nota tras el encuentro.

El pasado lunes, la plantilla y la dirección de la empresa retomaron estas negociaciones con el objetivo de "llegar a un acuerdo y tener un convenio colectivo para la mejora de las condiciones laborales de los trabajadores del servicio de limpieza de la ciudad". Por ello, los empleados desconvocaron la huelga indefinida que tenían previsto iniciar ese mismo día en señal de protesta y para solicitar mejoras salariales. A estos encuentros se sumaron representantes del ayuntamiento, como el teniente alcalde, Juan Manuel Forte, y el concejal de Limpieza, Francisco Hernández, para participar de las negociaciones, al formar parte de la empresa mixta con un 49%.

Ninguna de las partes quiso ayer explicar en qué consiste el acuerdo previo hasta que esté cerrado definitivamente. Tan solo destacaron "el esfuerzo hecho por la plantilla y la empresa para acercar posiciones que puedan dar satisfacción tanto a los trabajadores como a los intereses de los ciudadanos de Almendralejo, evitando de esta manera los perjuicios que a todas las partes hubiera supuesto un desacuerdo en dicha negociación".

Tras el encuentro de ayer, el sindicato representante de los trabajadores, UGT Extremadura, convocó a la plantilla para informale de este acuerdo previo y estudiarlo detenidamente. Una vez tomada una decisión se volverán a reunir con Cespa y el ayuntamiento para anunciarles la decisión que han tomado y en caso de que sea afirmativa firmar el convenio.

Una vez firmado, anunciarán cuáles son las mejoras salariales que han conseguido los trabajadores del servicio de limpieza y si han cedido en lo que pedían o la empresa en lo que proponían.

Recordar que los primeros reivindicaban un incremento salarial del 33% que se aplicaría durante los tres años que tendría de vigencia el convenio. Pero Cespa no aceptaba esta subida y propone una menor y firmar un convenio de dos años. Para la plantilla la propuesta de la empresa era insuficiente y tras no conseguir una aceptación de sus reivindicaciones decidieron convocar una huelga indefinida que no llegó a celebrarse.

Señalar también que entre lo que pedía la plantilla y lo que ofrecía la empresa había una diferencia de 30.000 euros anuales, que incluso los trabajadores pidieron al ayuntamiento que se encargase de aportarlos, ya que también forma parte de la empresa mixta.