El equipo de gobierno contempla la puesta en marcha de un tranvía que circularía por la zona centro una vez que el AVE sea una realidad en Mérida. Sería una de las consecuencias del aprovechamiento de la desmantelación de diez kilómetros de vías convencionales y del uso de las 24 hectáreas de terreno que supone la llegada del tren de alta velocidad a la ciudad. Esta nueva infraestructura está contemplada en el programa electoral socialista y el ejecutivo local no se ha olvidado de ella.

Según apuntó ayer la portavoz Estrella Gordillo, "hay que esperar a que esté todo cerrado en lo que respecta al AVE, al margen de la estación ya ubicada, para hacer lo del tranvía, pero mantenemos esa idea".

En todo caso, aclara que el tranvía no sería para comunicar todas las barriadas de Mérida, sino "una de las comunicaciones de la zona centro y tal vez con Nueva Ciudad, pero a lo menor no tanto con la periferia", pero todo está aún por concretar en este sentido, insistió.

Lo cierto es que la propuesta del tranvía ya la contempla el plan estratégico local elaborado durante el último gobierno local del PP. En este documento se argumenta que cuando desaparezca la circulación férrea en el tramo que va desde la barriada de San Andrés hasta la estación, como recoge el Plan General de Ordenación Urbana, se podría crear un tranvía para favorecer comunicación interna de la ciudad, desde la zona norte y sur con el casco histórico.