Los cuerpos del matrimonio cuyos cadáveres fueron hallados ayer por la tarde en su domicilio de Cáceres presentaban gran cantidad de golpes, sobre todo en el rostro, y, en principio, no se aprecian heridas de arma blanca o de fuego, según infoma El Periódico Extremadura de fuentes próximas a la investigación.

Estas mismas fuentes señalan que la Policía Nacional se personó en el domicilio, en cuyo salón fueron encontrados los cadáveres, tras recibir una llamada de vecinos, que habían visto al perro en el porche de la vivienda con el hocico y una de las patas manchadas de sangre y al ver que nadie respondía en la casa.

Sin embargo, la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, declara que por el momento sólo se puede informar de que continúan las investigaciones para aclarar las circunstancias de la muerte, al haberse decretado el secreto del sumario.

Tanto Pereira como el jefe superior de Policía de Extremadura, Ángel Galán, indican que se han celebrado en Badajoz una reunión ordinaria con los responsables de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y reiteran que se está trabajando "intensamente" en esclarecer los hechos.

En esta labor participan además de efectivos de la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Cáceres especialista de la Policía Científica de la Dirección General de la Policía, con experiencia en la resolución de este tipo de casos.

Respecto a las causas de la muerte, ambos responsables se limitaron a mantener la versión ofrecida ayer sobre que la misma se había producido de manera violenta, aunque eludieron pronunciarse sobre el tipo de heridas que presentaban los cuerpos.