Frente a la claridad con la que el concejal de Interior ha visto la necesidad de poner en marcha un plan de choque en San Lázaro como consecuencia de la droga que se mueve por el barrio, la Subdelegación del Gobierno dijo ignorar ayer si la situación es para tanto y advirtió de que serán los "expertos policiales, que son los que entienden, los que tendrán que decidir si hace falta o no". Así replicó ayer el subdelegado Fernando Solís a Francisco Martín, el primer edil que admite públicamente problemas derivados de la droga en el cerro de San Lázaro, y por proximidad en San Miguel, así como de convivencia en Gabriel y Galán.

"No sé –añadió– si el concejal tiene o no algún informe técnico sobre los problemas de los que habla y sus soluciones" y emplazó a los mandos policiales a tomar parte en este debate durante la junta local de seguridad que aseguró que se celebrará próximamente, aunque no ya el martes, como estaba anunciado, por motivos de agenda.

Aunque admitió la otra demanda del concejal, la de que se cubra el déficit de agentes de la comisaría, si bien pidió tiempo con el argumento de que los cupos de las academias no dan para más y que Extremadura no es, por su nivel de delincuencia, una de las zonas prioritarias para reforzar las plantillas.

No obstante añadió que Plasencia, por su situación geográfica, necesita un tratamiento especial por lo que desveló que la Delegación del Gobierno ha solicitado al Ministerio del Interior la revisión del catálogo de puestos de trabajo "porque yo también creo que setenta plazas se quedan cortas", aunque insistió en que en la comisaría placentina no hay más de nueve plazas vacantes.

En todo caso, el subdelegado afirmó que ya existe vigilancia policial en estos barrios. "Si no –señaló– cómo se iban a haber producido detenciones como las recientes" mientras hizo hincapié en los buenos resultados de la comisaría placentina por el aumento del 48% de detenciones en lo que va de año y la bajada de un veinte% del nivel de delincuencia, según el avance de datos que dio a conocer ayer.

Por lo que pidió también "sosiego" no sin admitir que el concejal de Interior "sería mal concejal si los vecinos le piden más policía y él no recoge la demanda". Por cierto, que el subdelegado del Gobierno se mostró receptivo a que representantes vecinales se puedan sentar en la junta local de seguridad para conocer de primera mano la situación de barrios como estos. Lo que ha pedido, de hecho, la federación de asociaciones de vecinos hasta ahora sin resultado.