Desde que en enero entró en vigor la reforma del Código Penal para endurecer los delitos de tráfico, la Policía Local de Badajoz ha llevado ante el juez a 151 conductores por cometer delitos contra la seguridad vial, aunque ninguno de ellos se vio privado de libertad, sino que fueron condenados al pago de multas y a realizar trabajos en beneficio de la comunidad.

Según el informe de atestados de la policía local que dio a conocer ayer el concejal de Tráfico, José Antonio Monago, y el inspector jefe de este cuerpo, Antonio Nogales, la mitad de estos delitos se refieren a la ingesta de alcohol, ya que 42 conductores dieron positivo en la prueba de alcoholemia tras producirse un accidente y otros 36 dieron positivo en diversos controles e inspecciones realizadas por los agentes en la capital pacense en los últimos siete meses.

Otros 54 conductores fueron pillados por la policía sin el permiso de conducir correspondiente, mientras que cinco se negaron a realizar la prueba de alcoholemia. Entre los delitos especialmente graves, se tramitaron 13 por conducción temeraria manifiesta y uno por conducción con desprecio a la vida de los demás. En este último, Antonio Nogales recordó que se detuvo a un joven de entre 18 y 30 años a primeros de año a la altura del concesionario de Renault en la Nacional V que conducía "poniendo en peligro la vida de los demás".

El informe elaborado por la Policía Local de Badajoz pone de manifiesto que el perfil del infractor es "masculino", ya que el 90% de los infractores son hombres, conductores de turismos y de nacionalidad española. Solo ocho de los 151 interceptados son portugueses y otros 12 son nacidos en otros países.

"La mujer es menos infractora que el hombre, al menos en este grupo de delitos cometidos en la ciudad de Badajoz", según explicó Monago, quien aseguró que la reforma del Código Penal ha provocado un incremento de las tareas administrativas de los agentes que ha obligado a plantearse una futura ampliación de efectivos especializados en atestado, algo que, según dijo, "estamos estudiando". En su opinión, solo cabe esto "o que haya una reforma legislativa para que los trámites sean más rápidos", porque si bien reconoció que la detracción de puntos del carnet de conducir se hace de forma rápida por vía telemática, la tramitación administrativa de los expedientes "es realmente compleja".

En este sentido explicó, que "incluso la práctica de un control de alcoholemia, que parece algo simple, es compleja, requiere una gran cantidad de trámites", por lo que considera que "el legislador tendría que habilitar un procedimiento para que sea más rápido y eficaz". Nogales recordó que en todos los turnos hay una unidad de Atestado, en total hay seis equipos y uno de coordinación central. El atestado tiene que estar en 24 horas en el juzgado "y los agentes que lo instruyen lo tienen que acabar, sea la hora que sea, no puede continuarlo la siguiente unidad, y eso sin dejar de atender otros accidentes que ocurran".

El concejal quiso dejar claro que "no quedan impunes los delitos contra la seguridad vial que se cometen en la ciudad". El inspector jefe recordó que estos delitos conllevan la privación de libertad, aunque las penas que están aplicando ahora los jueces son el pago de multas y trabajos en beneficios de la comunidad, "solo cuando una persona es multirreincidente ingresa en prisión", aunque advirtió que estos conductores "van a ir engrosando el fichero de antecedentes y en tres o cuatro años habrá más ingresos en prisión, porque muchos reincidirán".