Una plaga de murciélagos ha accedido a las instalaciones del Hospital Ciudad de Coria y se ha instalado en el edificio a través de unas grietas originadas en las paredes exteriores como consecuencia de un problema de cimentación.
La importante proliferación de estos molestos mamíferos en el recinto hospitalario –en las últimas semanas han aparecido tanto vivos como muertos en distintas dependencias– ha generado quejas del personal sanitario y usuarios del centro, ya que los animales acceden con facilidad al interior de algunas de las zonas más críticas del hospital, como pueden ser paritorios, dilatación y quirófanos.
El Servicio Extremeño de Salus (SES) ha afirmado que hasta el momento no se ha visto alterado el funcionamiento del centro. Sin embargo, un portavoz reconoció que el pasado lunes se celebró una reunión con todos los jefes de sección o representantes de los servicios quirúrgicos para adoptar medidas con el único y fundamental objetivo de garantizar "la idoneidad de las instalaciones". Ese mismo día, el hospital se vio obligado a suspender un quirófano de traumatología con el fin de poner en marcha todas las medidas higiénico-sanitarias preceptivas.
Por su parte, el gerente del área de salud de Coria, Emilio Villanueva, explicó a EL PERIODICO que la aparición de los murciélagos ha obligado a mantener una reunión con el director de Salud Pública, el director del hospital, que se encontraba de vacaciones, y el jefe de mantenimiento del centro para estudiar el protocolo a seguir. Villanueva aclaró, no obstante, que no se ha generado alarma entre el equipo de dirección, justificando la reunión de todos sus responsables en "la necesidad de trabajar en equipo".
El Servicio Extremeño de Salud (SES) reconoció, asimismo, que "esta incidencia se repite todos los años" como consecuencia de las grietas que existen en las paredes exteriores del hospital. La mayor incidencia, concretó, se registra "en la zona de Maternidad y en los pasillos de sucio de quirófanos", aunque "en cantidades mínimas", según la versión oficial. El gerente del área de salud cauriense se mostró convencido de que el día que más murciélagos han accedido al interior del centro su número no superaba los cinco o seis, una versión que contrasta con la del personal sanitario, que asegura que médicos, enfermeras y celadores se ven obligados constantemente a eliminar animales muertos del suelo e, incluso, de las rejillas del aire acondicionado, del sistema de ventilación y de los tubos fluorescentes. Personal sanitario aseguró ayer a este diario que ayer sacaron cuatro murciélagos de los quirófanos.
Ante esta situación, y pese a algunas contradicciones en las versiones, lo cierto es que en el centro hospitalario cauriense ha sido necesario adoptar medidas para intentar evitar la presencia de los murciélagos y así garantizar, sobre todo, la idoneidad de las instalaciones con el objetivo de que la asistencia sanitaria no se vea interrumpida.
ADOPCIÓN DE MEDIDAS / Entre las medidas que se han adoptado figuran las que el Servicio Extremeño de Salud denomina "medidas físicas", consistentes en el cerramiento de todas las grietas exteriores del edificio. Pero el método no ha resultado muy eficaz, ya que al taponar las grietas exteriores, los animales, de la variedad de los micromurciélagos debido a su reducido tamaño, han buscado salida hacia el interior del edificio.
Este hecho y lo que de él se ha derivado, la progresiva aparición de murciélagos dentro del hospital, ha obligado a la colocación de unas mallas en todas las rejillas de los techos del centro sanitario para impedir su acceso, aunque según el SES todos los animales hallados son crías de murciélago que al no recibir alimentación han muerto al intentar salir al exterior.
La dirección del hospital también ha puesto en marcha una serie de medidas preventivas para garantizar que los "quirófanos, pasillos e instalaciones son absolutamente asépticos". Para ello se han intensificado los controles de limpieza y bioseguridad en todas las instalaciones. Por último, se han adoptado medidas de tratamiento técnico que han obligado a la instalación de dispositivos de ultrasonido que obligan a estos pequeños mamíferos a abandonar su refugio en las paredes del hospital.
Aunque el SES sostiene que "podemos hablar perfectamente de casos aislados", el personal sanitario del hospital insiste en que se trata de una auténtica plaga que se ha instalado en la zona agrietada que se encuentra más próxima al área de Urgencias. Varios empleados del Hospital Ciudad de Coria aseguran que al caer el día pueden observarse cientos de murciélagos salir en bandada desde el interior del edificio, que se ha convertido en su refugio.
El problema no es nuevo y se ha venido repitiendo año tras año desde hace casi una década, tras la aparición de las primeras fisuras en las paredes exteriores del edificio, reconocían algunos trabajadores. En ocasiones anteriores, añadieron, la concentración de murciélagos fue menor, pero este año ha alcanzado unas proporciones alarmantes, ya que el taponamiento de las grietas exteriores ha obligado a los animales a buscar salidas hacia el interior.
Pero, para restar importancia al asunto, el gerente insistió en hacer constar que "si esto hubiese sido una infiltración enorme y tremenda se habrían adoptado una serie de medidas radicales que nada tienen que ver con las que se han adoptado". A pesar de todo, la dirección del hospital ha aconsejado a pacientes y personal sanitario que mantengan cerradas las ventanas, especialmente durante la noche, para impedir el acceso de animales vivos al interior.
