El grado de satisfacción de los usuarios del sistema sanitario extremeño se mantiene prácticamente igual en los dos últimos años, con un ligero descenso de una centésima en su apreciación general en 2007, que se situó en un 6,14 sobre 10 puntos, una cifra algo inferior al dato nacional, que se encuentra en el 6,27. Sin embargo, si se desglosa la percepción de los usuarios extremeños en las distintas áreas de atención sanitaria, el pasado año 2007 se produjeron algunos cambios con respecto a los datos del ejercicio anterior. Así, según el Barómetro Sanitario encargado por el Ministerio de Sanidad al Centro de Investigaciones Sociológicas, y a pesar de que se mantiene en un buen nivel, incluso por encima de la media nacional, la puntuación otorgada por los encuestados extremeños con respecto a si la atención en urgencias ha sido buena o muy buena ha caído considerablemente.

En concreto, el 83,1% de los pacientes que pasaron por urgencias el pasado año aprueba con nota la atención recibida, si bien en 2006 se decantaron por esta valoración el 91,9%. No obstante, el dato recogido en el último barómetro se mantiene en niveles por encima de la media nacional (79,4%), un dato que para el director gerente del Servicio Extremeño de Salud, Dámaso Villa, resulta tan positivo que la pérdida de nueve puntos con respecto a la encuesta anterior carecen de importancia, y más teniendo en cuenta que el 74,1% responde que fue atendido con mucha o bastante rapidez.

Esta misma situación es la que ofrece la percepción de los extremeños sobre las consultas con el especialista, que recibe una valoración de buena o muy buena por el 85,5% de los usuarios, aunque presenta un descenso de casi siete puntos respecto al 2006. En el plano contrario se sitúa la atención recibida por aquellos pacientes que fueron hospitalizados, cuya valoración positiva se ha elevado en un año en casi 20 puntos, pasando del 66,7% del 2006 al 82,7% en el último año.

Con respecto a los datos generales, los extremeños creen, en un 29%, que el sistema sanitario necesita cambios fundamentales para mejorar el servicio, y solo un 3,5% considera que la situación es tan mala que necesita rehacerse.

La encuesta, que ha sido realizada a 255 extremeños –6.081 en todo el país–, con un margen de error de +/- 1,2%, también toca asuntos como las listas de espera, sobre las que un 33% asegura que las autoridades no están realizando acciones para mejorarlas, y un 53% considera que siguen igual que hace un año, e incluso un 5,1% entiende que han empeorado.

Por otro lado, también se aprecia un incremento en la confianza de los extremeños en la sanidad pública en detrimento de la privada, opción que elegiría más del 70% de los encuestados para cuestiones relacionadas con la atención primaria, la hospitalización y las urgencias, con incrementos de más de 10 puntos porcentuales con respecto al año anterior. Solo en las consultas con el especialista baja la confianza de los extremeños en la provisión pública, que se reduce al 50%, si bien es cierto que también subió en seis puntos con respecto al año anterior. Por otro lado, solo la mitad de los encuestados cree que hay equidad respecto a la atención sanitaria en una u otra región española.