El consejero de Industria, Energía y Medio Ambiente, José Luis Navarro, ha reclamado, ante los miembros de la Comisión de Industria de la Asamblea de Extremadura, que si el Gobierno de España renueva la autorización de explotación de Almaraz, se reconozca de forma efectiva la solidaridad de Extremadura con otras comunidades autónomas por la contribución de la central a la garantía del suministro y de un menor precio de la energía eléctrica, así como a la lucha contra el cambio climático.

Navarro ha garantizado asimismo que el Gobierno regional asumirá las decisiones que sobre las centrales nucleares vaya tomando el Gobierno de España, "sea del color político que sea", pero, al mismo tiempo, señala que "seguimos manteniendo que nuestra posición es la petición de cierre, lo antes posible y de una forma ordenada, de la central nuclear de Almaraz, siempre que la planificación energética nacional lo permita".

Además, el consejero ha afirmado que la Junta considera prioritaria la seguridad y mantiene su exigencia de cumplimiento estricto de la normativa, de transparencia por parte de los titulares de Almaraz y de rigor en las tareas de control e inspección que le corresponden al Consejo de Seguridad Nuclear. No obstante, Navarro ha dicho que "mantenemos nuestra propia red de vigilancia en el entorno de Almaraz".

"Lo que no vamos a hacer es pedir el cierre inmediato, si con ello se pone en riesgo el suministro de energía eléctrica, en condiciones de calidad, seguridad y precio competitivo, a las empresas y a los ciudadanos de toda España", ha puntualizado.

Tras manifestar que la Consejería de Industria, Energía y Medio Ambiente está desarrollando actuaciones de ahorro y eficiencia energética y apoyando el mayor desarrollo posible de las energías renovables, especialmente de la termosolar y la fotovoltaica, el consejero ha recordado que será el Ministerio de Industria el que deberá resolver en 2010 la renovación de la autorización de explotación de la planta nuclear, previo informe del Consejo de Seguridad Nuclear sobre las condiciones de seguridad.

En su opinión, con el actual escenario energético, con el precio del petróleo disparado y a la vista de los datos sobre evolución de la producción de energía eléctrica por tecnologías, demanda y precios, la previsión es que los estudios técnicos llegarán a la conclusión de la necesidad del funcionamiento de las centrales nucleares españolas como mínimo, hasta los 40 años de actividad, por lo que de confirmarse la hipótesis, el funcionamiento de Almaraz podría prolongarse al menos otros 15 años más.

"Ante esa probable situación, y con la inversión ya amortizada, le hemos transmitido al Gobierno de España que Extremadura debe recibir beneficios por la continuidad de la central", ha señalado Navarro, quien ha solicitado el apoyo de los Grupos Parlamentarios para reclamar el reconocimiento efectivo de nuestra contribución al buen funcionamiento del sistema eléctrico nacional.