La Asamblea de Extremadura vivió un simulacro de incendio durante la celebración del pleno. Así y según informa El Periódico Extremadura, sobre las 13.00 horas se inició la evacuación del edificio y duró cerca de 20 minutos. Además de la evacuación, el Centro de Urgencias y Emergencias 112 simuló la atención a un afectado por intoxicación por humo.
En la simulación participaron un camión de bomberos, una unidad medicalizada del SES, una ambulancia y varios coches patrulla de la Policía Nacional. En el simulacro intervinieron trabajadores de la Asamblea y técnicos del Centro 112, miembros del Cuerpo de Bomberos, Policía Local, Nacional y Protección Civil. Según el director del Centro de Urgencias y Emergencias 112, Miguel Ángel Ruiz, esta iniciativa, que se efectuaba por primera vez en la Asamblea de Extremadura, sirve para ensayar la "efectiva" actuación y coordinación de todos los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y Emergencias y la "adecuada" evacuación de los trabajadores e integrantes del Parlamento extremeño.
En opinión del director del Centro 112 de Extremadura, la evacuación se llevó cabo de forma correcta y de acuerdo al protocolo de actuación normalizado por el 112. En primer lugar, los trabajadores de la Asamblea efectuaron la llamada de emergencias al Centro 112 alertando de un incendio propagado o de grandes dimensiones. El jefe de sala del centro de operaciones 112 atendió la llamada y activó el servicio de emergencias externas 112 y, posteriormente, movilizó a los recursos de emergencias necesarios para atender el incidente.
Mientras, en la Asamblea se daba a conocer a los trabajadores y asistentes al Pleno la situación de alerta a través del sistema de alarma de incendios y megafonía. A continuación los trabajadores de los servicios de emergencias comenzaron a ayudar a evacuar a los trabajadores y asistentes mientras pedían tranquilidad e insistían en apresurarse. Tras conducir a todo el personal al exterior del edificio de la Asamblea, a la plaza de San Juan de Dios, los trabajadores verificaron que no quedara nadie en todos los despachos, todos los aseos y todas las salas; seguidamente cerraron las puertas. Posteriormente, procedieron a la atención de un afectado por intoxicación debido al humo.
