El plan de inversiones incluido en los presupuestos municipales de este año se aprobó ayer en el pleno de abril sin el apoyo de la oposición –el PP votó no e IU se abstuvo–. En cambio, la concejala no adscrita, Ana Sánchez, le dio su beneplácito.

Los concejales del PP fundamentaron su rechazo en que el equipo de gobierno no había admitido las 18 enmiendas que habían presentado, para que las incluyeran en el plan, las cuales se traducirían en inversiones valoradas en tres millones de euros. El portavoz del gobierno local, Fernando Bote, respondió que no se habían tenido en cuenta porque la mayoría ya estaban incluidas en el plan.

Además, el alcalde José María Ramírez acusó al PP de "de falta de rigor y seriedad" y de "no querer trabajar con el equipo de gobierno", ya que, según dijo, "no es de recibo que la prensa se enterara antes que la Comisión de Hacienda de las enmiendas y que estas se entregasen solo dos días antes de aprobarse en el pleno". Ante esta afirmación, el concejal popular, José Alvariño, aseguró que las propuestas las entregaron a la comisión antes de informar a la prensa, ya que tuvieron una reunión con Bote, y añadió: "Han hecho las cosas cuando lo han creído oportuno".

Por su parte, el concejal de Izquierda Unida, Santiago Fernández Nieto, alegó que habían abstenido porque tampoco se han tenido en cuenta algunas de las propuestas que había presentado, aunque otras sí, como es la de la señalización de los pozos.

El consistorio invertirá este año en proyectos más de 32,5 millones, de los que un tercio (10.261.000 euros) se destinarán a actuaciones de infraestructuras, como la urbanización de más de 20 calles, ampliar el polígono industrial, renovar el alumbrado público y elaborar un plan de mejora de acerados y vías. El resto se dedicarán a la mejora de los servicios del ayuntamiento, educación, cultura, juventud, edificios públicos municipales y deportes. Además, hay que sumar los proyectos de los fondos Feder, y las inversiones de otras administraciones.