El ayuntamiento no ingresará casi 600.000 euros procedentes de fondos europeos por no "justificar en tiempo y forma" la ejecución y el pago de los proyectos Lusitania Turística y Lusitania Cultural, correspondientes a los fondos Interreg III y que se remontan al 2006. Así lo denunció ayer el concejal de Turismo, Roberto Olivera, quien ha recibido esta semana una comunicación del Ministerio de Economía en la que se le notifica esa pérdida de ingresos, y que achaca a "una irresponsabilidad muy grande por parte de los exconcejales Gloria Constantino y Manuel Gámez", responsables entonces de las delegaciones de Turismo y Hacienda, y Urbanismo, respectivamente.

Esa cuantía estaba encuadrada en el programa Interreg III A, que presentaron conjuntamente los ayuntamientos de Mérida y Evora (Portugal) para realizar, en el caso de Mérida, el centro de interpretación del agua de Proserpina y el Museo Abierto de Mérida (MAM). Según explicó Olivera, "había unos plazos de ejecución de esos proyectos y la prórroga finalizó en marzo del 2006 para acabarlos, pero la justificación del pago y la ejecución de la obra no fue hecha en tiempo y forma por lo que nos quedamos sin esos casi 600.000 euros".

La cantidad que el consistorio "deja de ingresar" son 246.370 euros a cuenta del proyecto Lusitania Turística y otros 335.923 por el Lusitania Cultural.

Olivera recordó que, por ejemplo, el MAM se inauguró poco antes de las elecciones del pasado año, casi un año después del plazo estipulado. Debido a esa "ineficacia", señaló, "al final es el pueblo de Mérida el que lo paga, al no ingresar esa cantidad". El 28 de febrero se reunirá en el ministerio para conocer al detalle las cuantías que Mérida sí recibirá de aquellos fondos.