El sindicato CSI-CSIF Extremadura denunció ayer que los veinte trabajadores del retén contra incendios de la localidad pacense de Calera de Léon, dependientes de la Consejería de Industria, Energía y Medio Ambiente, están trabajando en unas condiciones "tercermundistas". En un comunicado, aseguran que la Junta conoce la "deplorable" situación de estos trabajadores que, según dice, desarrollan su trabajo en una nave industrial que no reúne las mínimas condiciones higiénico-sanitarias, ya que carece de cuarto de baño, calefacción, iluminación eléctrica ni el mobiliario básico.

CSI-CSIF reconoce que, a pesar del estado de estas instalaciones, los veinte trabajadores del retén aceptaron, hace algo más de un año, comenzar a trabajar en ellas ya que los responsables de la Junta les dijeron que lo harían de forma provisional y por un breve espacio de tiempo. Sin embargo, critican que no ha sido así y el traslado de estos trabajadores a unas instalaciones dignas se está dilatando en el tiempo sin que los responsables de la Consejería de Industria hayan dado una respuesta satisfactoria a CSI-CSIF.

El sindicato cree que el Ejecutivo regional está "abusando" de la buena voluntad de estos trabajadores, por lo que exige que se resuelva su situación.