Demográficamente Extremadura sigue creciendo, aunque no lo hace de forma homogénea. En el 2007 el número de empadronados en la comunidad autónoma se ha situado en 1.089.990 habitantes, la cifra más alta de la última década. Esto supone un incremento de 3.500 habitantes respecto al año anterior, sin embargo, la tendencia no es positiva en todos los rincones de la región. En líneas generales, los pequeños y medianos municipios pierden población; y por contra, son los grandes núcleos urbanos –apenas una decena, incluidas las dos capitales provinciales y la autonómica– los que concentran la mayor parte de ese aumento.
La revisión del padrón municipal realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sitúa a Extremadura al borde de un hito: el de alcanzar la marca de 1.100.000 habitantes, un hecho que no ocurre desde la década de los setenta, antes de la diáspora que originó la inmigración. De acuerdo con la tendencia de los dos últimos años y si ésta se mantiene a corto plazo, eso se podría producir en el 2009 o el 2010, informa El Periódico Extremadura.
De momento, la región sigue creciendo. Si en el 2006 lo hizo en 2.494 personas; en el 2007 el aumento ha sido de 3.617. Sin embargo, el fenómeno tiene menos envergadura que en el resto del país, o al menos que en la mayor parte de las comunidades autónomas. De hecho, Extremadura es la segunda región con menor crecimiento demográfico durante el pasado año (con una subida del 0,3%). Solo Castilla y León y Galicia han crecido a menor ritmo, teniendo en cuenta que Asturias inició el pasado año con menos habitantes –fue la única que perdió población–.
En su conjunto, España ha alcanzado ya los 45 millones de habitantes –exactamente 45.200.737–. Y ello se ha producido gracias a que en apenas un año se han engrosado las cifras del padrón con medio millón de individuos más.