La Asociación Ecologistas Extremadura rechaza la respuesta recibida del Ministerio de Medio Ambiente respecto a sus críticas por la celebración de monterías en el Parque Nacional de Monfragüe, y exigen que dejen de realizarse. La asociación ecologista considera "incoherente" que el ministerio argumente en motivos de "control de las poblaciones de herbívoros las monterías celebradas en Monfragüe y denunciadas por la asociación.

La Asociación Ecologistas Extremadura recordó ayer que fue en noviembre cuando denunció ante el ministerio la celebración, "una vez más", de monterías en el Parque Nacional de Monfragüe, concretamente en los parajes conocidos como Guijo de los Frailes y Arroyo Calzones , ambos en el termino municipal de Malpartida de Plasencia y en las que se batieron, según los ecologistas, zonas dentro del Parque.

En su respuesta, Medio Ambiente argumenta que estas acciones se realizan como control de las poblaciones de herbívoros, pero para Ecologistas Extremadura parece claro que el ministerio "no ve o no quiere ver como tras este formalismo del control de la sobre-población de ungulados, se esconde la práctica más que evidente de monterías en un Parque Nacional, algo que infringe la actual Ley 5/2007 de la Red de Parques Nacionales".

Cuestiona la asociación, que si el problema lo genera esta "supuesta abundancia" de ciervos y jabalís, "cómo se explica que en este mes de diciembre en dos monterías celebradas también en terrenos del Parque y utilizando de nuevo la argucia de la población excesiva para poder concederse, solamente se lograron abatir dos ciervas en una de ellas y un jabalí en la otra". –Participaron dos rehalas de perros y 15 escopetas en cada una de ellas–.

Tras denunciar una vez más estas monterías, y exigir que dejen de realizarse, la asociación ecologista advierte además del peligro que está suponiendo ya para los visitantes que realizan alguna de las rutas marcadas en la zona, el encontrarse con perros sueltos "que muy bien podrían ser ejemplares perdidos por las rehalas, que acaban formando grupos y que campan libremente por Monfragüe.

Un incidente así, concluye Ecologistas Extremadura, "lo ha denunciado recientemente un grupo de senderistas que tuvieron que huir ante la presencia de perros que, en plena ruta del Cerro Gímio, les salieron al paso ladrándoles y corriendo amenazadoramente hacia ellos".

Para esta asociación ecologista, nada de lo anterior debería ocurrir "de aplicarse una gestión más elegante y menos permisiva" con el "incumplimiento" de las Leyes que rigen las actividades a llevar a cabo en los espacios naturales protegidos.