Torrejoncillo celebra hoy La Encamisá, una fiesta de Interés Turístico Nacional en la que se espera triplicar la población habitual, que es de unas 3.500 personas. Hoy es el día grande de un programa de actos que comenzó el 17 de noviembre y finalizará el próximo domingo.

El momento más esperado será esta noche a partir de las 22.00 horas con la salida del estandarte de María Inmaculada desde la iglesia de San Andrés para ser recibido por unos 200 jinetes y 400 escopeteros. Se dispararán unas 70.000 salvas, según manifestó el alcalde, José María Arias. Desde ese momento, se iniciará una procesión por las calles del pueblo. Juan Pedro Arias Moreno será este año el portaestandarte. Tras la procesión, la mayordoma, Rosa María Arias Paniagua, repartirá entre el público vino de la tierra y 50.000 coquillos.

Los actos continuarán el sábado con motivo del Día de la Pura. A las doce del mediodía se celebrará misa mayor en la ermita de San Antonio y le seguirá una procesión. A las 16.30 horas finalizará el Novenario, en la misma ermita, oficiado por el Obispo de la Diócesis de Coria-Cáceres, Francisco Cerro. Después, a las 19.30 horas se abrirá el Año de la Coronación Canónica de la imagen de María Inmaculada con un espectáculo de luz, sonido y pirotecnia en la plaza Mayor.

Por otro lado, en Aldeanueva de la Vera, Jarandilla y Madrigal, la lumbre y la Virgen de la Concepción serán esta noche protagonista del regocijo festivo que vivirá cada una de las localidades. A partir de las 19.30, las calles de Aldeanueva de la Vera se llenarán de hogueras de La ¡Viva!, ¡Viva! . Los jinetes participantes en la cabalgata, que saldrá desde la iglesia Parroquial a las 20.00 horas recorrerán un itinerario previamente establecido, en el que el capitán llevará el estandarte de la Virgen de la Concepción. Este años se ha adjudicado por primera vez el estandarte mediante subasta.

En Jarandilla serán Los Escobazos, fiesta declarada de Interés Turístico Regional, los que congregarán a varios miles de personas en torno a una singular fiesta de lumbre y fe mariana. Como en La ¡Viva!, ¡Viva! , sus orígenes se pierden en la noche de los tiempos. Las hogueras son además una nota destacada en la celebración de Los Escobazos . Sobresale por su altura la que cada año es encendida junto a la Ermita de la Virgen de Sopetrán.

Otra de las variantes festivas de la noche del 7 de diciembre la presenta Madrigal con Las Luminarias. Más de ochenta hogueras se encargarán de quemar varias toneladas de leña y trastos viejos mientras los vecinos, apostados a su alrededor, darán buena cuenta de viandas y licores hasta bien entrada la madrugada.

El alcalde madrigaleño, Urbano Plaza, ha señalado que, "dado el arraigo popular de Las Luminarias y el elevado poder de concentración de personas, que cada año va en aumento", tiene intención de solicitar a la Junta de Extremadura que se declare la fiesta de esta localidad como de Interés Turístico Regional".