Cáceres se enfrenta al periodo más largo sin el trasvase del Almonte al Guadiloba motivado por el descenso en la cota del embalse de Alcántara. Han transcurrido 18 días desde que el trasvase de agua se paralizó. Fue el 5 de noviembre, noticia que adelantó este diario, cuando se interrumpió.

El periodo más largo sin trasvase por este motivo fue en marzo del 2005, cuando se estuvo 24 días sin el agua del Almonte. Gobierno y oposición hablaron ayer del trasvase. Frente al pesimismo del PP, que habló de "situación peligrosa" y "momento crítico", el gobierno fue optimista al volver a confiar en que "en dos o tres semanas" se pueda reanudar el trasvase.

Ha habido periodos mucho más prolongados sin que Cáceres recibiese agua del Almonte, bien porque el Guadiloba estaba por encima del 70% de su capacidad o por razón técnica (averías o mejoras en el trasvase). En estos casos no era necesario el trasvase y ésta es la gran diferencia con la situación actual, dado que ahora sí conviene tener el agua del Almonte para que el Guadiloba se mantenga en unos niveles aceptables, en torno al 50%, que es como está ahora.

Estar sin trasvase a corto plazo no tiene importancia porque en el Guadiloba hay agua suficiente, pero si esta situación se prolonga a medio o largo plazo, hablamos de seis a siete meses, y además no llueve lo bastante para que entre agua en el Guadiloba, se volvería a lo que pasó en 1992, última vez que hubo restricciones, que fueron las que llevaron a que por urgencia se hiciese el trasvase del río Almonte al Guadiloba, una obra de emergencia que lleva 15 años funcionando, a pesar de que el nuevo abastecimiento se incluyó en el Plan Hidrológico Nacional (PHN) y se está trabajando en el mismo desde 1995, sin que aún se haya puesto la primera piedra.

En este contexto se producen las manifestaciones de ayer y la reunión de la comisión de Desarrollo Local para analizar la situación del abastecimiento. El concejal delegado de Infraestructuras, Miguel López, volvió a calificar la situación del abastecimiento de "preocupante sin ser alarmante" y confió en que "en dos o tres semanas" se pueda reanudar el trasvase gracias a la lluvia que caiga en la cuenca del Tajo, que haría subir la cota del embalse de Alcántara y a su vez la del Almonte en el punto del trasvase al Guadiloba.

Por su parte, el concejal del PP, José Joaquín Rumbo, que en la anterior legislatura llevaba las competencias que ahora asume López, dijo que se está en un momento "critico" y "en una situación peligrosa". Rumbo solicitó ayer la organización de una campaña de concienciación, similar a las del 2005 y 2006. López indicó que ahora no es el momento y recordó que ya se ha hecho una llamada de atención a la población para que ahorre.

Desde Iberdrola se apuntó ayer que se ha dado respuesta a la carta que la semana pasada se envió por la alcaldesa. En la respuesta se recuerda que se continuará desembalsando en Alcántara mientras que Red Eléctrica Española demande energía eléctrica para el mercado y se apunta que la compañía tiene la concesión de uso del embalse, concesión muy anterior al trasvase del Almonte, que fue una obra provisional y de emergencia.