El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha destacado en Cáceres que prevención es la mejor arma frente al consumo de drogas y recordó que en la región ya se desarrolla un programa de este tipo entre escolares con el nombre de "Prevenir para vivir" que incide en el fomento de hábitos saludables entre los chicos.

Fernández Vara ha hecho estas declaraciones en el colegio público Francisco Pizarro de Cáceres donde ha acompañado al ministro de Sanidad, Bernat Soria, en la presentación de un concurso nacional que pondrá en marcha el Estado en más de 1.000 colegios dirigido a chavales de entre 10 y 12 años para prevenir el consumo de drogas

El presidente de la Junta de Extremadura indicó que "la información y el conocimiento" de las consecuencias del consumo "es muy importante" pero alertó del "enemigo tremendo" que puede llegar a ser internet en estos casos, ya que los jóvenes tienen acceso a mucha información que no siempre se emplea adecuadamente.

En el acto, que contó con la presencia de varios de los directores de los centros que van a poner en marcha el programa, estuvieron también la consejera de Sanidad y Dependencia, María Jesús Mejuto; la de Educación, Eva María Pérez; la delegada del Gobierno, Carmen Pereira y la alcaldesa de Cáceres, Carmen Heras, entre otras autoridades.

Al término el ministro visitó el aula de informática y la sala de usos múltiples donde mantuvo un encuentro con alumnos de 6º de Educación Primaria que estaban practicando en una pizarra digital, y también se reunió con las profesoras encargadas del programa de prevención de drogodependencias en el centro.

EL SECRETO DE LA BUENA VIDA
Con esta presentación, arranca en 18 comunidades y ciudades autónomas ‘El Secreto de la Buena Vida', un programa de prevención de drogas en forma de concurso que se desarrolla a través de la participación en un juego multimedia. Está dirigido a alumnos de 5° y 6° de Educación Primaria (niñas y niños de entre 10 y 12 años), a sus padres, y a sus maestras y maestros.

En su segunda edición, este programa, que tuvo un enorme éxito el año pasado, incorpora como novedad una serie de recomendaciones para los padres sobre cómo utilizar el juego como instrumento educativo sobre drogas en el seno de la familia. "Con ello, se trata de de implicar a los padres en la prevención", ha explicado el ministro en su presentación.

El secreto de la buena vida trabaja factores de protección frente a las drogas, como las habilidades de resistencia a presiones del grupo, la autoestima, la respuesta a la conducta agresiva y la información sobre este tipo de sustancias. El Plan Nacional sobre Drogas, organizador del concurso, ha contado con la colaboración de la Obra Social de Caja Madrid.

UNA AVENTURA VIRTUAL
El juego consiste en un viaje virtual por las 19 comunidades y ciudades autónomas, durante el cual el jugador tiene que descubrir un secreto. Los jugadores vivirán una aventura en la que tendrán que enfrentarse a distintas situaciones y superar un conjunto de pruebas para llegar hasta la meta final. Sólo los que hayan conseguido completar el viaje comprenderán el sentido del secreto buscado: el de una buena vida que les ayudará a vivir plenamente sin drogas.

El concurso se desarrollará durante el primer trimestre del curso escolar 2007-2008 en colaboración con los planes autonómicos de drogas y las consejerías de Educación de las Comunidades Autónomas. Consta de dos fases: una autonómica y una gran final nacional que se celebrará en la primavera de 2008 en la sede de la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, en Madrid. Habrá premios para todos los participantes, especiales para los ganadores autonómicos y para sus colegios, así como para los tres primeros ganadores de la final estatal. El primer clasificado recibirá un viaje a Eurodisney para él y sus padres o tutores. El segundo y el tercero tendrán como premio una bicicleta y material deportivo.

OBJETIVOS DEL CONCURSO
El secreto de la buena vida tiene un doble objetivo. Por un lado, hacer llegar mensajes preventivos a los escolares a través de un instrumento lúdico a la vez que educativo, en una edad idónea para la prevención, puesto que es justo el momento previo en el que se suelen producir los primeros contactos con las drogas ilegales, el alcohol y el tabaco.

Por otro lado, contribuye a difundir entre los centros educativos los programas de prevención escolar de cada comunidad autónoma y facilita a los profesores el trabajo de prevención en clase, dotándoles de material educativo. Como los chavales pueden jugar en casa, también persigue implicar cada vez más a los padres en las tareas de prevención.

El ministro ha destacado, en este sentido, el éxito de este concurso en Extremadura, una de las Comunidades Autónomas donde más se ha incrementado el nivel de participación. De hecho, en el curso anterior participaron un total de 5.400 alumnos y 119 colegios, mientras que en la presente edición se han inscrito más de 6.500 chavales y 500 colegios.