Diego Pérez, concejal del Partido Popular, responsable de la comisión de Industria y Comercio compareció ayer ante los medios de comunicación para lamentar lo sucedido el pasado viernes con la caída de una cornisa en la calle Real. El edil indicó que una vez más se demuestra que la colocación de los mismos se ha realizado sin sentido. "Todo ha sido fruto de la improvisación, se ha hecho fuera de los plazos cuando el verano estaba terminando y para colocarlos y tener que retirarlos a los tres días no tenía sentido", dijo.

Desde el PP, señaló, "nos alegramos que todo se quedara en un susto, porque podía haber sido mucho peor y por eso queremos saber qué tipo de seguimiento estaban haciendo a la colocación de los toldos desde el ayuntamiento, qué técnicos han intervenido durante su colocación, y cómo ha sido el estudio de seguridad realizado"

Pérez añadió que "en el proyecto estaba contemplado que antes de la instalación harían un estudio previo del estado de las fachadas donde se iban a poner los toldos con la intención de detectar posibles fisuras o daños en las paredes que puedieran provocar la caída de la estructura por fenómenos meteorológicos y que los sistemas de fijación deberían incluir los componentes necesarios para la conexión de fijación a la pared", recordó.

También insistió Diego Pérez en que una vez más se ha demostrado que todo se ha hecho de manera precipitada, con mucha improvisación, "y todo con el único fin de percibir la subvención que estaba concedida por la Junta de Extremadura, sin preocuparles nada".