Tener estudios universitarios no es garantía para encontrar trabajo. De hecho, hay 8.000 parados extremeños con estudios universitario que no lo tienen y otros 21.000 considerados inactivos –es decir, personas en edad de trabajar pero que no figuran como demandantes de empleo–, que completan su currículum y esperan para lograr un trabajo acorde con su formación.

En total, por tanto, hay en la región casi 30.000 titulados en enseñanzas superiores que no tienen empleo. Así se desprende del último estudio realizado por el sindicato CCOO sobre la cualificación del mercado laboral en Extremadura, un informe presentado en Cáceres.

"Es un lujo para Extremadura el hecho de que tengamos ese número de personas con esa cualificación y que no se desarrollen en el mercado de trabajo, es un lujo que nuestra región no se puede permitir", señalo Julián Carretero, secretario regional de CCOO, que presentó ayer el informe junto a Miguel Coque, secretario de Formación y Empleo del sindicato. En este sentido, Carretero afirmó que "es fundamental que estas personas se incorporen a la población activa, a la búsqueda de empleo, porque será la única forma de generar riquezas".

Según el estudio, la razón por la que este grupo cualificado queda excluido o decide autoexcluirse del mercado de trabajo es la falta expectativas laborales parejas a su formación o porque no tienen esperanzas de encontrar un trabajo de calidad.